La plaza de toros de Lorca será reinaugurada en primavera

Estado actual de los tendidos de la plaza de toros de Sutullena, en obras. / JAIME INSA / AGM

El 50% del graderío estará instalado a finales de la próxima semana y los trabajos apuntan a su finalización para el primer trimestre del año

Los aficionados lorquinos a la tauromaquia esperan impacientes el momento de volver a ver una corrida de toros en el Coso de Sutullena. Han pasado casi 12 años desde que, un 25 de septiembre de 2010, Paco Ureña, en su lidia con un Vitorino llamado ‘Pobrecito’, protagonizara las últimas verónicas aplaudidas desde las gradas de dicha plaza. En el lugar de los asientos que ocuparon entonces los asistentes se instalan este mes de agosto nuevas gradas de hormigón, para que alrededor de 4.500 personas puedan volver a disfrutar de capotazos y estacadas sobre la arena lorquina.

En los círculos taurinos se viene hablando hace tiempo de un mes, marzo de 2022, para la vuelta de los toros a la Ciudad del Sol. Fuentes del Ayuntamiento de Lorca confirman a LA VERDAD que su «intención» era y es esa, siempre y cuando el desarrollo de las obras lo permita, pero se muestran cautos a la hora de fijar un día de reapertura ante posibles imprevistos. Problemas surgidos en los últimos años, el más fehaciente de ellos el parón de diez meses en 2021 a causa de la modificación inicial del proyecto, así como algunos retrasos en los suministros en el presente 2022, explican que nadie quiera confirmar las fechas que se manejan extraoficialmente: el domingo de Resurrección, que en la Semana Santa de 2023 se celebrará el 9 de abril, o el día de San José, domingo 19 de marzo.

El presidente del Club Taurino de Lorca, Juan Coronel, reconoce a este periódico «su deseo de que la plaza se reinaugure cuanto antes, si bien San José sería un día muy bonito para hacerlo», ya que tradicionalmente ha habido toros en esta jornada en la Ciudad del Sol. «Sería perfecto», asegura antes de mencionar a los toreros que le gustaría ver ese día: «Paco Ureña tiene que estar sí o sí, por todo lo que representa, no solo por ser figura del toreo lorquino, si no por todo lo que ha luchado por esta reconstrucción desde el primer día». Por otro lado, sabiendo que «parece imposible», asegura que «el sueño de cualquier aficionado lorquino sería verlo en el cartel junto a Pepín Jiménez».

Espacio multicultural

Coronel incide en que la reconstrucción del Coso de Sutullena va mucho más allá del ámbito taurino. En su opinión, «Lorca es una ciudad que ya ha sido prácticamente reconstruida tras el terremoto y, aunque quedarán cosas por hacer, la reinauguración de la plaza supondría poner la guinda y cerrar un ciclo de 12 años de lucha de los lorquinos». Además, el presidente del Club Taurino recuerda que la misma servirá como espacio cultural, con música, actividades deportivas y gastronómicas. «Al final, será disfrutada por todos».

En efecto, según el proyecto, más de la mitad del anillo exterior de la plaza de toros tendrá uso hostelero y comercial, para lo que se dispondrán cuatro locales, mientras que la otra mitad del inmueble incluirá dependencias culturales.

Avanzan los trabajos

En el despacho de arquitectos Romera y Pascual, encargado de la rehabilitación del Coso de Sutullena, confían en que, a pesar de los retrasos sufridos, las obras puedan estar finalizadas en el primer trimestre de 2023. Según confirmó a este periódico uno de sus socios, José Luis Martínez Romera, el proyecto «difícilmente» podrá ser finalizado en el plazo inicialmente previsto, diciembre de 2022, pero las obras estarían acabadas para marzo del próximo año «si no hay ningún imprevisto. A día de hoy, estamos en plazo para ese mes», señala el arquitecto.

De acuerdo con sus previsiones, a finales de la semana que viene ya estará instalado el 50% del graderío en la plaza de toros lorquina, puesto que se espera la llegada en los próximos días de buena parte de las gradas a colocar. Una vez finalizados los trabajos en torno a la estructura, se acometerán aquellos relativos a las instalaciones de iluminación, sonido y protección contra incendios, entre otras necesarias para el uso de la plaza, tanto para acoger corridas de toros como eventos culturales.