Francisco Berenguer: Gran festero de Carthagineses y Romanos

Toca despedir a un gran festero que se nos fue en plenas fiestas de Carthagineses y Romanos, Francisco Berenguer Carbonell, un alcoyano que nació un 19 de agosto de 1938. Paco estudió en los Salesianos de Alcoy, para realizar su formación como Perito Químico Industrial en la afamada Escuela de Alcoy, ya que no quiso participar en la empresa familiar. Con su título bajo el brazo, se trasladó a Cartagena en 1962 para ingresar en la Empresa Nacional de Fertilizantes (Enfersa). Volvió a su Alcoy natal, para contraer matrimonio con Pepa Soler Silvestre en 1964. De su matrimonio nacieron dos hijos, Ana, alcoyana y Paco, cartagenero. En 1966 dejó Enfersa y marchó a la refinería de petróleos Enpetrol, donde realizó trabajos en el laboratorio. Su carrera profesional la dio por terminada en Repsol, donde formó parte del equipo de personal y formación.

Tanto Paco como Pepa, estaban plenamente integrados en la sociedad cartagenera, primero, en la Semana Santa, se hicieron del Santiago Apóstol, participando activamente en la agrupación. Paco creó la peña gastronómica El Bogavante con amigos y compañeros de trabajo, haciendo rutas gastronómicas por la comarca y con la amistad y la buena mesa como principal motivo para reunirse. Después, se integró en las fiestas de Carthagineses y Romanos en la legión Tribunos de Roma, donde fue directivo de la misma. En el quinto año de las fiestas fue fichado por la Federación de Tropas y Legiones como secretario general de la misma, cargo que ocupó durante el mandato de dos presidentes. Su amor por las fiestas también lo compartía en Alcoy, en Moros y Cristianos, desde 1966, y como socio protector de la Fila Chano hasta que su presidente, Paco Sou, en un ensayo le dijo: «’Chiquet’ tu este año arrancas diana» y, desde ese año 1966, a desfilar con su Fila. Se da la circunstancia de que todos los miembros de su familia, nietos, hijos, yerno y nuera, han participado en actos festeros.

Paco, gran seguidor del Barcelona, disfrutó de amigos, familia, y fiestas, y también colaboró con temas sociales de nuestra ciudad, sobre todo en el equipo de su gran amigo Javier Gómez-Vizcaíno, con el que entabló una gran relación, tanto empresarial como personal. Paco se nos fue, pero queda para la historia su gran faceta festera, donde se ganó infinidad de amigos e instituciones que valoraron su gran trabajo y dedicación a esta nuestra Cartagena.

Querido amigo Paco, dejas un gran legado y seguro que pronto estarás organizando una nueva legión en el Paraíso, con tantos festeros amigos que te habrán recibido con los brazos abiertos.