Vélez ataca a Castillo y el PP acusa al PSOE de querer «adulterar» la Cámara

Francisco Lucas, ayer, en la Asamblea con otros diputados socialistas. / PABLO SÁNCHEZ / AGM

El líder socialista culpa al presidente de la Asamblea de «venderse» y los populares le recuerdan que el reglamento se aplica por igual para todos

Alberto Castillo «está demostrando que se vende absolutamente al poder establecido en la Región de Murcia; se vende al patrón del cortijo». Con esas declaraciones, el secretario general del PSRM y delegado del Gobierno en la Región, José Vélez, endureció ayer sus ataques al presidente del Parlamento autonómico, señalado por los diputados socialistas y de Podemos tras la suspensión de una Junta de Portavoces prevista para ayer. En ella, por primera vez esta legislatura el bloque de izquierdas tenía posibilidades de marcar la agenda parlamentaria de la próxima semana aprovechando la desaparición del Grupo Parlamentario Vox y la incorporación de sus cuatro miembros al Mixto. La petición de aplazamiento fue presentada por el PP y Ciudadanos acogiéndose al reglamento de la Cámara. Posteriormente, PSOE y Podemos registraron otro escrito solicitando que se mantuviera la convocatoria. Esta fue desestimada, porque prevalecía la primera, y causó gran polémica. La Mesa –formada ahora por Castillo, los socialistas Gloria Alarcón y Antonio José Espín, así como por el popular Miguel Ángel Miralles– adoptó ambas decisiones en virtud del reglamento y con el asesoramiento de las letradas de la Asamblea.

Aun así, la bronca creció cuando, también el lunes, la Mesa nombró portavoz interino del Grupo Mixto a Francisco Carrera, de Vox, en sustitución de María Marín, de Podemos. Tuvo en cuenta para ello el orden alfabético de los apellidos de sus ocho miembros, como establece el último reglamento de organización y funcionamiento del grupo. Estará en el cargo hasta que haya uno nuevo, en un plazo de entre quince días y un mes.

Lucas ve «arbitrariedad»

Por todo ello, el portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Francisco Lucas, pidió ayer la «dimisión inmediata» de Castillo, al que señaló como «brazo ejecutor de las cacicadas de López Miras» y del que dijo que no garantiza el correcto funcionamiento de la actividad parlamentaria. Además, lamentó que la Asamblea esté en manos de «personas sin ética que han traicionado a sus partidos y solo buscan su beneficio». Igualmente, consideró «inaudito que Castillo se niegue a convocar una Junta de Portavoces que ya estaba programada porque el PP ha perdido la mayoría» y que se está dando un «espectáculo bochornoso». Y habló de decisiones «arbitrarias» para referirse a la designación de Carrera.

El PSOE no obtuvo contestación de Castillo, que guarda silencio, pero sí del portavoz del Grupo Popular, Joaquín Segado, quien dijo: «Se han aplicado exactamente las mismas normas que cuando fue nombrada portavoz la señora Marín» en septiembre de 2021. Y atribuyó los ataques socialistas a que Lucas está disgustado por «no haber podido sacar ventaja política de la situación generada y pretende confundir y retorcer la realidad».

«Lo que de verdad es una anomalía, además de una indignidad, es intentar aprovecharse de las últimas incorporaciones al Grupo Mixto, de las que el PP es absolutamente ajeno, para adulterar la representación parlamentaria y fabricar una mayoría contraria a la voluntad expresada en las urnas, que es lo que pretendían PSOE y Podemos», criticó Segado. Y acusó a Marín de querer apropiarse de unos votos «para imponer junto al PSOE una mayoría fraudulenta».

En defensa de Marín salió el coordinador autonómico y diputado nacional de Podemos, Javier Sánchez Serna, quien dijo que el objetivo de «las maniobras de López Miras en la Asamblea» era acabar con Podemos y Marín, «la única voz que les ha hecho frente esta legislatura y que ha desnudado sus vergüenzas».

López Miras se desentiende

Sin embargo, López Miras se desvinculó de lo ocurrido en la Asamblea por el pase al Grupo Mixto de su consejero de Educación: «Es una situación que no ha generado ningún diputado del PP, ni del Grupo Popular, sino de otros grupos parlamentarios; es una situación que no gusta a nadie, ni a mí, ni es deseable».

Según el presidente, su Gobierno seguirá trabajando por los murcianos, «intentando garantizar la estabilidad». Además, se mostró convencido de que los diputados de Vox que han pasado al Grupo Mixto y han ayudado a sostener su ejecutivo –entre ellos la consejera de Educación, Mabel Campuzano– seguirán haciéndolo hasta el final de la legislatura.

La Asamblea Regional de Murcia ahorrará más de 60.000 euros por la desaparición del Grupo Parlamentario Vox a siete meses de la finalización de la X Legislatura. Tal y como marca el reglamento de la Cámara, cada grupo percibe una asignación mensual (9.875 euros) para hacer frente a sus gastos ordinarios de funcionamiento. Luego existe una variable de 2.395 euros por cada diputado, que en el caso del Grupo Mixto, convertido en el tercero más numeroso del arco parlamentario tras la llegada de los cuatro parlamentarios de Vox, gestionará directamente cada partido o los diputados, según acuerden.

No obstante, la principal consecuencia económica de la disolución de Vox es que la Asamblea recuperará cerca de 200.000 euros depositados en una cuenta bancaria, fruto del ahorro de esas asignaciones desde el inicio de la legislatura. Los servicios económicos de la Cámara han dado un mes de plazo al exportavoz Juan José Liarte para que liquide los pagos pendientes y devuelva lo restante.

Cesan cuatro eventuales

Otro efecto es que han cesado en sus puestos los cuatro trabajadores eventuales que ejercían de asistentes de Liarte, Francisco Carrera, Pascual Salvador y Mabel Campuzano. Algunos de ellos se reincorporarán cuando esté organizado el nuevo Grupo Mixto, aunque está por ver si en el mismo número. Todo dependerá del acuerdo al que lleguen ahora los ocho diputados y de lo que establezca el nuevo reglamento de funcionamiento.

Según detalló un portavoz de la Asamblea, sí que se mantienen en sus puestos «por decisión del presidente» los tres asistentes que trabajaban para el Grupo Mixto hasta ahora: dos al servicio de los diputados de Podemos María Marín y Rafael Esteban y uno con Ana Martínez Vidal y Juan José Molina, de Ciudadanos.