La crisis del poder judicial marca la fiesta del 12 de Octubre

Cuca Gamarra, portavoz popular en el Congreso, y Patxi López, portavoz del PSOE en la Cámara / EFE

Por primera vez, los actos de la fiesta nacional no contarán con la presencia de la máxima representación del gobierno de los jueces

El desfile de Doce de Octubre se desarrolla hoy con un hecho inédito: por primera vez en la historia, no contará con la máxima representación del gobierno de los jueces, con la presidencia del Consejo General del Poder Judicial. Y esa crisis, la del poder judicial, la situación de bloqueo en su cúpula por la falta de acuerdo entre los principales partidos, sobrevuela los actos de esta fiesta nacional. Bien es cierto que se ha producido un deshielo en los últimos días entre el PSOE y el PP, que escenificaron el pasado lunes Sánchez y Feijóo, Bolaños y González Pons, emplazándose a negociar en serio, a una última oportunidad para alcanzar un acuerdo. Y ese deshielo lo ha desencadenado la dimisión de Carlos Lesmes, del presidente del Consejo General del Poder Judicial, preanunciada el domingo, oficializada el lunes y publicada hoy mismo en el Boletín Oficial del Estado.

Pero la polémica prosigue esta mañana: parte de los vocales conservadores del CGPJ han declinado acudir al desfile en protesta porque, dicen, no recibieron a tiempo la invitación del Ministerio de la Presidencia, cosa que el departamento de Bolaños niega. Los vocales conservadores sí acudirán, en cambio, a la convocatoria de la Casa Real, a la recepción posterior habitual de esta fecha.

Estaba previsto que hoy estuvieran presentes los vocales del CGPJ, los miembros de la Sala de Gobierno del Supremo y los presidentes de los Tribunales Superiores de Justicia.

La celebración de hoy del Doce de Octubre recupera la completa normalidad tras su interrupción por la pandemia. Así, primero se celebra el desfile con todos sus participantes y sin mascarilla y, a continuación, tiene lugar la recepción en el Palacio Real con los 2.500 invitados habituales.

A la llegada del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, algunos asistentes le han abucheado, como suele ser habitual cuando es un socialista quien es el inquilino del Palacio de la Moncloa. Además, Sánchez ha hecho su aparición unos segundos tarde, lo que ha provocado que los reyes hayan tenido que esperarle.

Con respecto al jefe de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, es la primera vez que acude al desfile en calidad de tal, dado que es presidente nacional del PP desde la pasada primavera. Pero Feijóo ya antes había estado presente en los actos del Doce de Octubre como presidente de Galicia que ha sido durante más de una década. De hecho, todos los presidentes de las comunidades autónomas acuden al desfile, a excepción del vasco, Íñigo Urkullu, y el catalán, Pere Aragonès.

Por parte del Gobierno, además del presidente, acuden todos los ministros, salvo cuatro. La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, viaja a Estados Unidos. La vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, se encuentra en Praga, en una reunión con sus homólogos europeos. Sólo una de las vicepresidentas, por tanto, Yolanda Díaz, acude a las dos citas del Doce de Octubre, el desfile y la recepción en el Palacio de Oriente.

Faltan, sin embargo, dos representantes de Unidas Podemos en el Ejecutivo, la titular de Derechos Sociales, Ione Belarra, que se encuentra en avanzado estado de gestación, y el ministro de Universidades, Joan Subirats.