Cómo limpiar las juntas de los azulejos con productos que ya tienes en casa

Uno de los
problemas más comúnes en el baño o la cocina es la suciedad que se acumula en las juntas de los azulejos que se acaban poniendo de color negro y estropea el aspecto de estas baldosas. Restos, polvo o moho hará que estas estancias parezcan sucias, sobre todo si el azulejo es de un tono claro. Colocadas en el suelo o en la pared puedes devolverle su color blanco del primer día con estos productos que seguro ya tienes en casa.

Lo ideal es mantener las juntas limpias para que no se oscurezcan de forma definitiva y la única solución posible sea cambiar la lechada de rejunte. En estos casos tendrás que quitar la que ya hay y volver a aplicar este relleno estructural. Antes de dejar pasar el tiempo y que ocurra esto, puedes eliminar la suciedad acumulada con estos
trucos de limpieza.

Trucos para devolverle el blanco a tus azulejos

El método más efectivo es el amoniaco. Si ya lo tienes en casa es la opción más recomendada para conseguir un resultado perfecto, ya que es muy útil para quitar manchas de grasa. Mezcla el producto con agua caliente. Para saber qué cantidad es la más adecuada, ten en cuenta que la proporción de agua debe ser diez veces la de amoniaco. Con un cepillo frota sobre las juntas y eliminarás la suciedad más incrustada. Después puedes pasar un trapo para quitar los restos. Si no dispones de amoniaco puedes utilizar lejía que además de blanquear te ayudará a desinfectar.

En caso de que no quieras
utilizar limpiadores tan abrasivos, existen remedios caseros con otros productos que también te pueden servir para eliminar la suciedad de las juntas de los azulejos. Saca de tu despensa el vinagre y el bicarbonato y mézclalos con agua caliente. Echa la mezcla y frota con un cepillo. Otro producto que ya tienes en casa y puedes utilizar es la pasta de dientes. Aprovecha la
parte sobrante del bote para dejar los azulejos más brillantes.