Denuncian que solo hay un técnico por cada 29 alumnos con necesidades especiales

Denuncian que solo hay un técnico por cada 29 alumnos con necesidades especiales

Concentración en el CEIP Artero, de Bullas. / PLATAFORMA NINGÚN NIÑ@ SIN ATE

Los padres y madres se concentran a las puertas de los colegios para reclamar la contratación de más especialistas

Pilar Martínez Mañogil

La Plataforma Ningún Niñ@ sin ATE convocó ayer concentraciones en 32 centros de enseñanza murcianos para exigir que aumenten el número de auxiliares técnicos educativos (ATE) para los niños con necesidades especiales. «Nos hemos concentrado de esta manera y no todos juntos en Murcia para que la información llegue a todas partes y para que los padres que tienen un hijo con necesidades especiales sepan que existe la figura del ATE», explica a LA VERDAD, Inmaculada Hellín Rubio, ATE y madre de un niño con autismo.

En la Región de Murcia, según los datos recabados por la plataforma a través del portal Plumier XXI de la Consejería de Educación, hay 13.166 alumnos con necesidades especiales –repartidos entre los centros públicos (9.969) y los concertados (3.197)– y 457 auxiliares técnicos educativos.

La plataforma, que surgió después de organizar una primera concentración frente a la Conserjería, el pasado 16 de octubre, y no obtener respuesta, señala que en la Región hay dos tipos de centros. Aquellos en los que sí hay técnicos pero son insuficientes y los que no tienen ninguno, como es el caso del CEIP Hellín Lasheras de Javalí Viejo, donde está matriculado el hijo de Inmaculada Hellín. «Tenemos tres niños autistas de diagnóstico de grado 3 –severo– y Carlos Garrido, director general de Atención a la Diversidad, nos sigue diciendo que, como es un colegio muy pequeño, con solo tres alumnos no es suficiente para que haya un ATE», cuenta indignada. «Sin embargo, yo estoy en un centro donde trabajo de ATE y atiendo a tres niños. Y he trabajado en algunos donde he atendido a dos. No tienen ningún criterio para elegir dónde hay ATE y dónde no», agrega.

Los auxiliares tienen que repartirse entre varios centros, de manera que los niños quedan desatendidos

«El problema es que para poder elegir centro educativo hemos tenido que renunciar al ATE cuando no debería ser así, porque son los derechos de nuestros hijos», denuncia. Cree, también, que parte del problema es que el autismo es una enfermedad más invisible y, por eso, «se queda en el limbo».

Servicio insuficiente

Aparte de no haber auxiliares suficientes para asistir a estos alumnos –que tocan a un técnico por cada 29 niños con necesidades especiales–, el servicio que ofrecen es insuficiente. Hay centros donde los técnicos están de baja y no se ha buscado sustituto. Además, la mayoría de estos profesionales solo están contratados 25 horas a la semana y tienen que repartirse entre varios centros. Debido a esto, los niños no cuentan con un ATE todas las horas que están en el colegio sino unas pocas, a veces, incluso, tan solo una o dos. «Algunos ATE tienen turnos partidos y solo pueden estar 2 o 3 horas en un centro y, después, se van a otro; y, cuando pasa esto, los docentes tienen que dejar la clase de lado para atenderlos, cuando no debería ser así», apostilla.

Desde la plataforma, denuncian también que las última oposiciones fueron en 2006 y la lista de interinos está «ultra mega acabada». Después empezaron a llamar a gente por el SEPE, pero «ni con esas cubren todas las plazas».

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