La multa de la DGT que puedes recibir por conducir con abrigo

La multa de la DGT que puedes recibir por conducir con abrigo

Una chica conduce con abrigo.

Pueden castigarte por llevar prendas que afecten o dificulten las maniobras de circulación

Susana Fernández

La bajada de temperaturas propia de la época está haciendo que muchas personas saquen de sus armarios los abrigos, bufandas y guantes para abrigarse contra el frío. Son prendas imprescindibles de la temporada, pero su uso no está recomendado en todas las situaciones: hay que tener cuidado a la hora de
conducir. Cuando te sitúas al volante, siempre debes tener en cuenta que las prendas que lleves sean lo más cómodas y adecuadas posible para realizar una conducción segura.

Por eso, el uso de estas prendas no es recomendable, sobre todo si se trata de abrigos muy gruesos que limitan el movimiento, pues pueden impiderte realizar alguna maniobra correctamente y llegar a ser un riesgo al volante. Lo cierto es que usar estas prendas no está prohibido por la
DGT, pero en ciertas ocasiones sí que puede estar relacionado con algunas infracciones recogidas en el Reglamento General de Circulación, que en caso de ocasionar un accidente, puede conllevar una multa de hasta 200 euros si un agente lo considera peligroso.

El motivo lo recoge el Real Decreto 1428/2003: «El conductor de un vehículo está obligado a mantener su propia libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción, que garanticen su propia seguridad, la del resto de los ocupantes del vehículo y la de los demás usuarios de la vía». Es por esto que llevar un abrigo, guantes o incluso botas de montaña puede llegar a limitar los movimientos e impedir una posición correcta.

Para evitar esta situación y tampoco pasar frío al volante, se recomienda encender el motor y esperar un poco hasta que el coche se caliente. Así podrás quitarte el abrigo antes de subirte y conducir mucho más cómodo. En el caso de los zapatos, la DGT aconseja utilizar un calzado que vaya bien sujeto al pie, que no resbale, que no sea demasiado pesado y, en caso de que vayas a llevar un calzado poco adecuado para conducir (
sandalias, tacones, botas de montaña), lo mejor será guardarlo para cuando llegues a tu destino y conducir con unos más cómodos.

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