Andronikashvili subirá las revoluciones

Si la opción de sacarse un cupo de la manga podía responder a un nombre, ese sería el de Rati Andronikashvili (Tiflis, 2001). Georgiano, con formación universitaria estadounidense en la primera división de la NCAA, con experiencia profesional en Grecia y en su país, por quien es internacional… pero con licencia de jugador formado localmente en España. Con solo 21 años, a Andronikashvili le ha dado tiempo a todo eso y a, además, haber pasado rápidamente por el Baskonia siendo cadete y una fugaz cesión que apenas llegó a nada en el filial EBA del Burgos.

Con 1,93 metros de estatura, el georgiano que acaba de firmar el UCAM es todo un portento de la naturaleza en las posiciones de base y escolta, dueño de un físico que apenas se ve en Europa y más al otro lado del Atlántico, a donde se fue habiendo ganado ya algún dinero como profesional tras un breve paso por el Ionikos Nikeas griego (club en el que se formó como jugador Fotis Katsikaris, exentrenador del UCAM) y el Rustavi de su país. En la NCAA, donde los jugadores no pueden cobrar ningún sueldo por sus servicios baloncestísticos, se enroló en la Universidad de Creighton, una institución privada y católica.

Hasta la fría Omaha, en el estado de Nebraska y misma ciudad donde escapaba de la justicia Saul Goodman bajo el alias de Gene Takovic, personaje de una de las más exitosas series de televisión del último año, ‘Better Call Saul’, se trasladó Andronikashvili en la primavera de 2020 para vivir el baloncesto universitario estadounidense en una tardía entrada para lo que habría sido un ciclo formativo natural. Sin embargo, a escasos días de comenzar la temporada 2020-21 sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda que le hizo estar de baja todo el curso, jugando para los Bluejays de Creighton únicamente la 2021-22, que finalizó con un promedio anotador de apenas 1,8 puntos por partido con un pírrico porcentaje de acierto en tiros del 22,4%.

Pura energía

Pero no son puntos lo que el UCAM busca en Andronikashvili. Es, precisamente, dejar más liberado a los que tienen que meterlos en el exterior, encargándose de todas aquellas tareas en donde se precise el extra de energía que le sobra a este georgiano de potente tren inferior, que tendrá como principal misión asignada por parte de Sito Alonso amargar la existencia del exterior rival más talentoso. Y que, así, Trice esté más fresco en el ataque, Bellas pueda tomarse algún respiro más y, McFadden, tres cuartas partes de lo mismo.

Con todo, también puede tener sus momentos anotadores en partidos con más jugadas de finalización a campo abierto, que es como tuvo el que ha sido hasta la fecha su partido más destacado en el circuito profesional. Fue en la primera ronda del torneo de clasificación para la Copa del Mundo 2023, el que ha sido hasta ahora la única derrota de España, cuando el combinado de Sergio Scariolo sucumbió en la prórroga ante los georgianos 82-76. Aquel pasado 4 de julio, Andronikashvili se fue a los 17 puntos en 33 minutos de juego, teniendo el mejor +/- en pista para Georgia. Pero, los dos siguientes, sin ir más lejos, se quedó sin anotar.

Diestro, usa muy bien las dos manos y su cuerpo para las finalizaciones ante hombres más grandes, pero no se le podrán pedir los puntos que a Davis, más que asentado como hombre principal de Sito en su tercera temporada y que llegará como regalo de Navidad.