Recuperar 250 metros de línea de costa en Portmán superará los 75 millones de euros

Vista panorámica de la bahía de Portmán, con la zona de dragado en el centro. / Antonio Gil / AGM

El Ministerio quiere tener en marzo un primer avance del proyecto conjunto de regeneración y construcción de un puerto deportivo

Recuperar la mitad de la línea de costa original de la bahía de Portmán, la de 1957, antes de que comenzaran los vertidos de residuos mineros supondrá una inversión superior a 75 millones de euros. Es la valoración preliminar que tiene encima de la mesa la Secretaría de Estado de Medio Ambiente que dirige Hugo Morán.

Según fuentes del Ministerio de Transición Ecológica consultadas por esta redacción, la Unión Temporal de Empresas (UTE) Proes-Ibermed, encargada de la redacción del proyecto básico de regeneración de la bahía, deberá avanzar en marzo de 2023 «la escala económica y temporal» para la ejecución del proyecto, aunque ya se da por seguro que «recuperar 250 metros de línea de costa costará más de 75 millones de euros».

Hacerse una idea del ingente volumen de estériles sepultados en la bahía no es fácil, ya que entre 1957 y 1990 se vertieron decenas de millones de toneladas a través de tuberías procedentes del lavadero ‘Roberto’. Si retornar al espejo de agua original supondría dragar unos 9 millones de metros cúbicos de residuos, «un escenario realista consistiría en extraer 1,2 millones de metros cúbicos, es decir, ganar unos 250 metros de línea de costa, dejando una playa estable de entre tres y seis metros de profundidad», sostienen desde el Ministerio.

De modo que, siendo inviable un escenario de sellado –con arcilla– de la bahía en su estado actual por el rechazo de los vecinos de Portmán y las organizaciones sociales y ecologistas y, del mismo modo, la regeneración integral por el desorbitado coste económico del proyecto, los técnicos del Ministerio ven esta opción de regeneración parcial como la más «factible».

Sin embargo, hallar la solución para, en el mismo proyecto, abordar la regeneración parcial de la bahía y la construcción de un puerto deportivo y de usos tradicionales, acuerdo al que se llegó entre el Ministerio y la Comunidad Autónoma en la última reunión de la comisión de seguimiento celebrada en octubre, será complicado.

Esta sinergia, defendida de forma insistente por la Consejería de Fomento, con el apoyo del Ayuntamiento de La Unión y, sobre todo, de los vecinos, implica que la UTE redactora del proyecto «redefina conceptualmente el objeto de su trabajo», admiten desde el Ministerio.

En primer lugar, porque no está claro si debe ser primero «la regeneración parcial de la bahía y después la excavación del puerto» o, por el contrario, «empezar a construir el puerto entre los estériles y a continuación trabajar en la definición de la playa y zonas verdes sobre la superficie no dragada».

En cualquier caso, sea cual sea la alternativa que se elija, el tratamiento ambiental de los estériles mineros –con presencia de metales pesados contaminantes– requerirá la construcción sobre el terreno de «una planta industrial de tratamiento de residuos» (tierras y aguas) y «una infraestructura de transporte a un vertedero en la Sierra Minera». El vertedero, a su vez, requerirá la preparación de «una o varias antiguas cortas mineras» para alojar los materiales dragados y descontaminados.

En marzo del próximo año, si se cumplen los plazos dados por el propio Hugo Morán en octubre en Portmán, donde presidió la comisión de seguimiento, el Ministerio espera contar al menos con la «idea básica» para afrontar definitivamente la regeneración de la bahía, un reto mayúsculo de ingeniería ambiental a nivel mundial.