La DGT advierte de los momentos del día en los que es más fácil sufrir un accidente

Los ciudadanos se deben desplazar a su lugar de trabajo cada día ya sea en transporte público o en su propio vehículo. Son muchos los que tienen que madrugar bastante para trasladarse hasta la oficina o ciudad en la que trabajan. Por ello, la Dirección General de Tráfico (DGT) pide mucha precaución en la carretera, ya que gran cantidad de personas deben salir cada día y en condiciones adversas.

Con la llegada del frío se suceden los días de tormenta, de nieblas y de
asfalto mojado y resbaladizo, algo que puede dificultar la conducción. La DGT advierte de que es muy importante conducir siguiendo las normas de tráfico y las señales que vayan apareciendo en cada momento en la vía. Además de prestar mucha atención a la carretera hay que asegurarse de tener una buena visión. Según la DGT, la frase que más se repite tras un siniestro vial es «no lo vi».

Los momentos en los que es más fácil sufrir un accidente

Para que ni los conductores ni los peatones sufran accidentes es muy importante prestar mucha atención y seguir la señalización en cada momento. Si el conductor está cansado o está bajo los efectos del alcohol o alguna otra droga, existe más riesgo de sufrir un accidente. A pesar de estos casos concretos, la DGT destaca dos momentos del día en los que es más fácil sufrir un accidente tanto como conductor como peatón. Los conductores deben recordar que los
peatones son los usuarios más vulnerables en la vía, por lo que hay que extremar la precaución.

La DGT advierte que las horas más críticas para la accidentalidad vial son al amanecer y al anochecer. Según afirma la DGT, un estudio elaborado por varios expertos en oftalmología de la Universidad de Helsinki, casi el 24% de los siniestros viales tienen que ver con un fallo de observación o pérdida de la atención visual.

Por ello, «las horas más críticas» para la accidentalidad vial son precisamente «cuando disminuye la luminosidad», es decir, el amanecer o el anochecer, afirmó el presidente del Colegio de Ópticos-Optometristas de la Comunidad Valenciana, Andrés Gené. «Una baja capacidad visual limita las percepciones, provocando una inadecuada visión de señales y elementos de la vía, distracciones y errores de cálculo», concluye Gené.

Para evitar accidentes en cualquier momento, los conductores deben circular a la velocidad que marque la vía en cada momento. Esto ayudará a detectar a tiempo cualquier problema en la calzada o que un peatón vaya a cruzar la calle. En cambio, si se circula con exceso de velocidad puede ocurrir que el conductor no sea capaz de reaccionar en una situación de emergencia.