Oh Bro!: «La americana es una música sin artificios»

Oh Bro!: «La americana es una música sin artificios»

Oh Bro!. / charlie balibrea

Banda

El grupo murciano presenta su primer disco con canciones propias, el radiante ‘Move into the country’, en un concierto con entradas agotadas

Alberto Frutos

Que Oh Bro! se vieran obligados a sacar una fecha extra, materializada en el día de ayer, tras agotar entradas para su concierto de esta misma noche en La Yesería es, sin lugar a dudas, una de las noticias musicales más hermosas que podemos encontrar en estos últimos compases del año. Y es que, más allá de ser un nuevo acto de amor hacia la cultura por parte del público, supone un emocionante reconocimiento hacia la americana como género incapaz de sucumbir al paso del tiempo y las modas. Una admirable destreza para esquivar los guiños de los almanaques que también encontramos en ‘Move into the country’, el extraordinario disco firmado por este equipo de ensueño liderado por Miguel Bañón, Carlos Vudú y Pito Hervás y completado por Raúl García e Irene Cano. Una formidable banda que ha sabido trasladar el lado sensible y festivo de sus conciertos a unas canciones que transmiten la brisa inconfundible de los clásicos. Charlamos con ellos.

Oh Bro!

  • Viernes
    21.00 horas

  • Murcia
    La Yesería.

  • Entradas
    agotadas.

-¿Esperaban la manera en la que el público ha ido acogiendo cada uno de los pasos de la banda desde que iniciaron su trayectoria?

-Carlos Vudú: Todo está yendo de una manera muy natural. Empezamos haciendo versiones de temas que nos encantaban. Cuando todo empezó a coger empaque, decidimos lanzarnos a tocar nuestros propios temas. Y la gente siempre se ha mostrado superreceptiva y con ganas de disfrutar cada paso.

-Su primer trabajo de estudio, ‘Move into the country’, era un paso importante y lo saldaron con un triunfo incontestable. ¿Cómo fue el proceso de composición y grabación?

-Pito Hervás: Fue la mejor forma de mantenernos en activo trabajando a distancia, pero sintiéndonos juntos y estimulados creativamente en tiempos de pandemia. Pudimos convertir el momento en la oportunidad perfecta que nos habría costado encontrar. Los tres nos pusimos a componer y a maquetar por nuestra cuenta y una vez que tuvimos un buen paquete de canciones las grabamos en los estudios de Miguel, Raúl y Pito. Bañón estuvo al mando del sonido del disco. Algunas canciones se quedaron en el tintero para el futuro.

-Cada uno de sus conciertos es una auténtica fiesta. ¿Uno de los objetivos principales que se plantearon con el disco fue capturar esa energía?

-C. V.: Cuando empezamos a componer este disco sabíamos que teníamos que competir con las versiones que hacíamos para que nuestras canciones no desentonasen en directo. Así que teníamos claro que queríamos captar esa energía festiva.

-¿Qué dirían que aporta cada uno de ustedes al grupo a nivel personal y creativo?

-Miguel Bañón: Somos tres tipos muy diferentes y al mismo tiempo compatibles, cada uno aporta lo suyo. A grandes rasgos, y sin ánimo de estereotipar, Carlos es el espíritu libre y desenfadado del rock and roll, Pito suele dar una visión más sentida y emocional, y yo soy un cabrón perfeccionista. Además, están Irene Cano al violín y Raúl García a la batería y percusiones campestres varias. Ambos son piezas fundamentales en el sonido Oh Bro! con su sapiencia, gusto y buen hacer.

-¿Cómo nace su pasión por la música country?

-C. V.: Yo creo que deberíamos hablar más bien de pasión por la ‘Americana Music’, que es el término que engloba a corrientes como el folk, country, blues y rock con raíz en los Estados Unidos. Todos hemos crecido con el rock y el pop de base. Pero empiezas a investigar las raíces de todo, vas tirando de la manta y llegas a estos géneros maravillosos. Creo que es un proceso bastante natural en cualquier músico.

-¿Dónde consideran que reside la clave para que esta música siga conectando de una manera tan genuina con público de todo el mundo?

-M. B.: Supongo que existen diversos factores y cada cual verá los suyos. Yo creo que es una música sin artificios, que huele a elementos naturales y humanos y que abarca tanto sentimientos profundos como el más puro divertimento y desenfreno.

-P. H.: Es el nexo en común de cualquier género de música de raíz, que están intrínsecas en la cultura y no son flor de un día.

-Para aquellas personas que estén interesadas en descubrir este género, además de su citado disco, ¿qué obras les recomendarían para empezar a introducirse en el género?

-M. B.: Cada uno de nosotros tenemos nuestros referentes y muchos son comunes. Por decir algunos ejemplos bastante clásicos: ‘Sweetheart of the rodeo’ (The Byrds); ‘Buffalo Springfield Again’ (Buffalo Springfield); ‘The gilded palace of sin’ (The Flying Burrito Bros.); ‘Hejira’ (Joni Mitchell); ‘Manassas’ (Manassas); y ‘Comes a time’ (Neil Young).

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