El Supremo absuelve a un murciano condenado por robos por acceder a su historial médico sin permiso del juez

Fachada de la sede del Tribunal Supremo, en Madrid. / reuters

La Guardia Civil logró, a través de un informe de La Arrixaca, identificarlo como parte de una banda que asaltaba viviendas con armas en la Región y Alicante

El Tribunal Supremo ha absuelto a José M.N., un murciano que fue condenado a nueve años de cárcel por una oleada de violentos robos en viviendas de la Región y de Alicante. La Sala de lo Penal estimó el recurso presentado por su abogado defensor, Guillermo Ruiz, del despacho Pardo-Geijo, y entiende que la investigación que llevó a la Guardia Civil hasta él debe ser declarada nula ya que los agentes accedieron, sin su consentimiento ni el del juez, a su historial médico. Un paso, advierte el tribunal, que fue determinante para conocer su identidad y poder arrestarlo. Tras declarar nula esa indagación, el Supremo entiende que procede absolver al procesado.

La Audiencia Provincial de Alicante condenó a este murciano, que ya había afrontado otras condenas anteriores por asaltos, a nueve años de cárcel por de dos delitos de robo con violencia en casa habitada, uno de ellos con uso de arma y la agravante de uso de disfraz, y varios delitos de lesiones. Este grupo, según recoge la sentencia, desde finales de 2019 hasta principios de 2020 que se produjo su desmantelamiento, perpetró una veintena de asaltos a casas en Murcia y las localidades alicantinas de Dénia, Novelda, San Vicente del Raspeig, Busot y Sax. En muchos de esos asaltos, los integrantes del grupo, que fueron condenados también en esta resolución, emplearon armas de fuego.

Lesiones en un hombro

En uno de esos asaltos, José M.N. resultó herido como consecuencia del enfrentamiento con el propietario del domicilio. La Guardia Civil conocía que desde el teléfono de uno de los implicados en el asalto se había realizado una llamada a un teléfono móvil poco después de uno de los golpes y que en esa conversación un tal Pepe pedía a una mujer que fuese a recogerle. Los investigadores comenzaron a tirar del hilo y buscaron en los hospitales hombres que hubiesen sido atendidos por presentar lesiones compatibles con ese rifirrafe.

En el hospital Virgen de La Arrixaca las gestiones dieron sus frutos y los agentes comprobaron que el 22 de enero de 2020 los médicos atendieron a José M.N. con un fuerte dolor en el hombro y en un dedo de la mano derecha. Este explicó a los sanitarios que había tenido una pelea en la que había sido golpeado con un martillo. En el parte se incorporaba un número de teléfono que coincidía con el que la Guardia Civil rastreó y un nombre de mujer que aparecía también en la conversación captada.