El nuevo impuesto que ya ha entrado en vigor y se descuenta del sueldo de los trabajadores

Este nuevo año supone la entrada en vigor de un nuevo impuesto que se descuenta del sueldo de trabajadores y autónomos. El conocido como
Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) es una de las medidas incluidas en la Ley de garantía del poder adquisitivo de las pensiones y de otras medidas de refuerzo de la sostenibilidad financiera y social del sistema público de pensiones publicada en 2021 que fechaba en 2023 su puesta en marcha. Esta novedad es fruto del acuerdo con los sindicatos para
engordar la hucha de las pensiones.

El nuevo impuesto es uno de los
cambios que entra en vigor en 2023 y se mantendrá hasta 2032. El MEI sustituye al Factor de Sostenibilidad que, según CCOO, estaba reduciendo hasta un 25% la cuantía de las pensiones de las generaciones más jóvenes. Por eso, Comisiones Obreras asegura que este mecanismo es la forma de frenar «los recortes» en las jubilaciones. Según los cálculos del sindicato, la reforma de 2013 en el sistema de pensiones estaba provocando que disminuyera la cuantía inicial de la pensión a trabajadores nacidos a partir de 1954. Una reducción que incrementaría con el paso de los años afectando todavía más a los jóvenes, que desde 2057 contarían hasta con un 19% menos de pensión.

¿Cuánto se descuenta del sueldo?

Los trabajadores y autónomos pagarán este impuesto a través de su nómina. El MEI se traduce en una subida de las cotizaciones sociales de un 0,6%, de la cual los trabajadores asumirán un 0,1% y el 0,5% correrá a cargo del empresario. En caso de una base de cotización media, situada en 1.976,42 euros, supondrá 1,98 euros del salario bruto mensual, mientras que las empresas asumirán 9,88 euros. Esta cifra desciende si el sueldo es inferior y aumenta para aquellas nóminas más altas. Así, si cobras 1.000 euros se descuenta un euro al mes del sueldo, mientras que para las bases máximas de cotización los trabajadores pagarán 4,14 euros y los 20,7 euros las compañías.

Por tanto, el dinero recaudado de la cotización de empleados y autónomos se utilizará exclusivamente para el gasto de las pensiones. Esto supondrá un incremento del Fondo de Reserva que se activaría para que las pensiones no se vean afectadas en caso de que haya problemas coyunturales entre los ingresos y los gastos de la Seguridad Social. Paralelamente, este 2023
suben un 8,5% las cuantías mínimas y máximas de las pensiones. Y es que esta prestación se ha convertido en uno de los desafíos más importantes a largo plazo: no hay trabajadores suficientes para afrontar el pago de una población cada vez más envejecida.

Esta forma de recaudación que afecta a empleados y autónomos evitará, según el gobierno y los sindicatos, que en un futuro las pensiones sufran recortes aunque el gasto crezca más de lo previsto. Después de 2032, fecha que finaliza el MEI, será el momento que se analizará la situación para ver si según las previsiones del gasto en pensiones en 2050 será necesario emplear el dinero recaudado y no tener que reducir las cuantías.