Política Social aún no sabe cuándo sacará sus ‘cheques guarde’ ni con cuánto dinero contará

Un niño juega en la guardería, en una foto de archivo. / NACHO GARCÍA / AGM

Aseguran que siguen a la espera de que Educación les transfiera el dinero, mientras centenares de familias aguardan su beca

Centenares de familias que llevan a sus hijos a escuelas y centros de atención infantiles dependientes de la Consejería de Política Social siguen esperando la convocatoria de
ayudas para el pago de las mensualidades de guardería. Mientas 2.723 hogares han comenzado a recibir la beca, de entre 800 y 1.200 euros, esas familias no han podido siquiera solicitarla porque todavía no han salido las ayudas.

El llamado
‘cheque guarde’, que pretende ayudar a los hogares en el pago de la guardería, salió el pasado noviembre. Sin embargo, la orden publicada por la Consejería de Educación solo contemplaba los centros, escuelas y guarderías autorizados por esa misma consejería, y no tuvo en cuenta que centenares de niños asisten a centros autorizados por Política Social. Esas familias se encontraron con que ni quiera podían completar la solicitud, ya que al introducir el código de identificación del centro no se les aceptaba porque no figuraba como autorizado. El error fue denunciado por decenas de familias afectadas y también por la Unión de Cooperativas de Enseñanza de la Región de Murcia (Ucoerm), a la que están asociados muchos de los centros afectados. El Gobierno regional decidió entonces guardar para ellos parte de la partida, que tenía asignada una dotación de 3,4 millones de euros.

Sin embargo, las ayudas de Educación fueron repartidas hace ya un mes y en la Consejería de Política Social siguen a la espera de que Educación les comunique de qué asignación disponen para sacar su convocatoria, que de momento no tiene fecha. Después de que Educación haya repartido tres millones de euros entre las 2.723 familias que han visto aceptada su solicitud, solo ha quedado un remanente de 400.000 euros, que previsiblemente se destinará ahora a la convocatoria de becas que debe sacar la Consejería de Política Social. Queda la posibilidad de que el Gobierno regional complete la asignación, que a juicio del presidente de Ucoerm, Juan Antonio Pedreño, es escasa para atender las previsibles solicitudes.

Entre tanto, Educación no aclara cuándo transferirá el dinero a Política Social, ni concreta a cuánto ascenderá la partida exacta. «Estamos pendientes de que se habilite el dinero desde Hacienda», se limitan a contestar. En Política Social tampoco se atreven a dar una fecha para la convocatoria e insisten en que las respuestas las tiene la Consejería de Educación.

La convocatoria de Educación está en cambio prácticamente resuelta. La Administración regional ingresará la cuantía de las ayudas a 2.723 familias. Educación recibió un total de 6.407 solicitudes, de las que 5.301 cumplían con los requisitos de renta, que establecían que podían pedir la ayuda los hogares en los que los dos progenitores ingresen hasta 50.000 euros anuales; en caso de tributación individual, el tope de renta será de 30.000 euros. De esas 5.301 peticiones ajustadas a la convocatoria, Educación ha concedido 2.723, ajustándose también a los criterios de renta y miembros de la unidad familia, hasta agotar el presupuesto previsto, de 3 millones de euros.

Las demás solicitudes, 2.135 han sido denegadas «por haberse consumido el crédito disponible para el periodo y por haber tenido que establecer orden de prioridad por no existir crédito suficiente para todas las ayuda que cumplen los requisitos», explicaba la propuesta de resolución de la Consejería de Educación. Las ayudas tienen carácter retroactivo, es decir, desde septiembre, cuando empezó el curso.

Para familias trabajadoras

La convocatoria establecía, como también se hará con la de Política Social, umbrales de renta más elevados de lo habitual en este tipo de ayudas, ya que la pretensión de la Comunidad es que puedan optar familias medias trabajadoras y no solo las rentas más bajas. En convocatorias similares anteriores, las ayudas han quedado desiertas porque los criterios de renta eran muy exigentes.

El modelo de este sistema de ayudas directas no se ajusta al espíritu del plan del Ministerio de Educación para impulsar la oferta pública y gratuita de 0 a 3 años, pero sí al propósito de la Consejería de Educación para financiar puestos también en centros privados.