Agustín Ramos arremete contra Felipe Moreno: «Su proyecto es ignorante, imprudente e ilógico»

La actualidad institucional del Real Murcia está en plena ebullición. Menos de 24 horas después de la rueda de prensa abierta a todos los accionistas en la que
Felipe Moreno dio a conocer sus planes de futuro en caso de entrar en el club, Agustín Ramos arremetió este viernes contra el que fuera dueño del Leganés. Para el presidente de la entidad grana, el empresario cordobés solo quiere «imponer su dictadura» en el Murcia e incluso le acusó de ser «el verdadero dueño del Cartagena».

Agustín Ramos defendió que el club «se encuentra al corriente de pagos» y en «un momento estable, con una directiva capaz de encontrar recursos económicos que posibilitan la viabilidad del club«. También calificó el proyecto planteado por Felipe Moreno de «ignorante, imprudente e ilógico». El exdueño del Leganés, que se ha comprometido ante notario a inyectar cinco millones de euros de aquí al 30 de junio si entra y que posteriormente pondría otros cinco si fueran necesarios, aseguró que haría frente a las distintas obligaciones económicas.

Estas pasarían por los compromisos con las administraciones públicas (Hacienda y Seguridad Social), el concurso de acreedores y resto de pagos. Además, planteó la posibilidad de dejar la deuda del club a cero en un plazo inferior a cinco años y en el apartado deportivo propuso un proyecto basado en fichar de jóvenes talentos para revalorizarlos y venderlos posteriormente, además de la construcción de una ciudad deportiva para atraer así a jugadores prometedores.

«Solo busca hacer dinero», advirtió también el presidente grana, que aseguró que Felipe Moreno no quería hacerse a cargo de la deuda anterior a su llegada. El abogado Andrés López matizó ese asunto y comentó que se trataba de la deuda que se hubiera generado durante la presidencia de Agustín Ramos y que no estuviera contemplada en las cuentas del club a la llegada de Moreno.

Al actual máximo accionista del Real Murcia, muy crítico en sus declaraciones, tampoco le gustó el momento elegido por Felipe Moreno para plantear su hoja de ruta para el club grana, que calificó de «imprudente» al producirse durante la temporada, «cuando el equipo está jugándose el ascenso», a pesar de que recientemente Ramos y Roca inyectaron dinero en el club y hubo negociaciones con varios fondos de inversión, incluido uno de Antonio Perea, para entrar en el Real Murcia.

Incluso, el mandatario grana le acusó de ser el «verdadero dueño del Cartagena». Precisamente, la vinculación de Felipe Moreno con otros clubes como el FC Cartagena, donde en los últimos años hubo un nexo de unión con el Leganés, o el Hércules también fue motivo de algunas de las preguntas en la rueda de prensa del jueves. «No tengo nada que ver con el accionariado del Cartagena. Nunca voy a pertenecer a dos clubes», aseguró.

Una junta para decidir el futuro del Real Murcia

Lo más normal es que aún queden más capítulos en los próximos días y semanas relativos a la propiedad del Real Murcia. De hecho, las cosas pueden cambiar mucho en el club grana dentro de un mes. Para entonces, ya se habrá celebrado una Junta General Extraordinaria que, tras la reaparición de Felipe Moreno, puede tener importantes consecuencias y definir el camino que seguirá la entidad en los próximos años. Un futuro que ya no pasa por una alianza entre Agustín Ramos y Felipe Moreno.

Además de las últimas palabras del presidente grana, el que fuera propietario durante muchos años del Leganés confesó que Ramos y él, después de varios meses negociando, «no son compatibles». Lejos queda ya aquella opción de la cogobernanza.

La junta del 8 de marzo será decisiva para la entidad. Por un lado, Agustín Ramos y su actual consejo pretenden convertir en acciones todos los préstamos puestos tanto por Ramos como por Enrique Roca. Eso le daría al presidente del club cerca de un 35% de la propiedad y cerca del 14% a Enrique Roca. Al mismo tiempo, un grupo de accionistas trabajan para reunir las adhesiones necesarias para que se incluyan nuevos puntos en el orden del día destinados a abrir la puerta a Felipe Moreno y a sus cinco millones de euros. De ser así, y de conseguirlo posteriormente en la junta, el máximo accionista de la entidad pasaría ser el empresario cordobés.