¿Cada cuánto limpias tus cepillos para el pelo? Este es el motivo por el que deberías hacerlo con frecuencia

No solo es suficiente con lavar tu cabello cuando es necesario, hay que seguir una rutina como si se tratase de tu piel. Igual que limpias e hidratas tu piel con cremas, la exfolias de las impurezas y utilizas un tono adecuado de
maquillaje, debes cuidar tu cabello y los elementos que utilizas para peinarlo y lavarlo. Es recomendable utilizar un champú apropiado para lavar tu pelo, pero también debes cuidar los peines que usas cada día para peinar tu cabello.

Los cepillos para el pelo son herramientas que utilizas cada día y se ensucian fácilmente. Estos objetos absorben el polvo, pero también
aceites y otros productos que utilizas para arreglarte el cabello. Por ello, hay que dedicar tiempo a limpiar los cepillos, porque cuando los vuelvas a usar, toda esa suciedad acumulada regresará a tu cabello. Además, cada día el pelo se cae y muchos de ellos quedan adheridos al peine, por lo que es necesaria una limpieza regular.

Un estudio de la Universidad de Arizona afirma que los cepillos para el pelo son uno de los hogares más frecuentes para las bacterias. En estos objetos se llegan a acumular más de tres mil colonias de bacterias por pulgada cuadrada. Estas bacterias proceden de mechones de cabello roto y de los residuos que se forman a causa de los productos que usamos para el pelo ya que aglutinan una gran cantidad de células muertas de la piel, polvo y residuos de productos.

Cuantos más productos utilices para el
pelo, más frecuente debe ser la limpieza del cepillo. Para evitar tener un cuero cabelludo seco, sentir picazones y reducir la grasa, hay que tener una buena rutina y limpiar también estos objetos. Lo más acertado es limpiar tu cepillo del pelo cada una o dos semanas y evitar estos efectos negativos. Si empleas muchos productos para tu cabello cada día, como pueden ser lacas o aceites, puedes limpiarlo dos o tres veces a la semana.

Cómo debes limpiar tu cepillo para el pelo

Para empezar a limpiar tu peine, lo primero que debes hacer es retirar el cabello que se ha acumulado en las cerdas, este paso se puede realizar con la ayuda de otro peine. A continuación, hay que llenar el lavabo del baño con agua tibia y se agrega champú para crear espuma. Si quieres realizar una limpieza profunda puedes agregar una o dos cucharadas de bicarbonato de sodio bien disuelto en el agua.

Deja el cepillo en reposo de 3 a 5 minutos. Si tiene acolchado suave en la base de las cerdas, es mejor mantener esa parte seca. No lo sumerjas entero si la base es de madera, porque se puede estropear. Basta con agitarlo en el agua varias veces para lograr un buen resultado. Si el cepillo está muy sucio, se puede usar un cepillo de dientes viejo para limpiar la base y las cerdas, empieza desde abajo hacia arriba y frota los bordes para eliminar cualquier acumulación. El último paso es poner el cepillo bajo un chorro de agua fría y secar bien con un paño.