Los nominados de la Región se quedan sin Goya en una gala que premió a Siminiani, vinculado a Murcia

A pesar de contar con varios nominados de la Comunidad, ninguno de los
premios Goya otorgados este sábado viajará hasta la Región de Murcia. Mayor fortuna tuvo el cántabro Elías León Siminiani, nacido en Santander pero muy vinculado a Murcia, donde se crió y aún siguen viviendo algunos de sus familiares, como su hermana. El realizador consiguió la estatuilla al Mejor Cortometraje de Ficción por ‘Arquitectura emocional 1959’.

Los edificios y el urbanismo son protagonistas de una cinta que tiene el amor como eje conductor. Tanto es así que, durante su discurso de agradecimiento, Siminiani tuvo unas palabras para evocar el recuerdo de los emblemáticos cines Rex y Floridablanca de Murcia, actualmente cerrados, entre otros espacios que ya son solo un recuerdo.

Al Goya otorgado a ‘Arquitectura emocional 1959’ también aspiraba el tándem formado por la murciana Eva Libertad y la molinense Nuria Muñoz, las directoras del cortometraje ‘Sorda’. En la cinta, Miriam Garlo, actriz no oyente y hermana de Eva Libertad, profundiza desde la ficción en una realidad poco conocida para la sociedad en general. Además, la obra se grabó en distintos puntos de Molina de Segura.

A pesar de quedarse sin estatuilla, el éxito de ‘Sorda’ ha propiciado su próximo salto al formato largometraje, en cuya realización ya se encuentra trabajando el equipo creativo. Quizá la Academia de Cine le conceda una segunda oportunidad a la historia.

Los Premios Goya 2023 también dejaron sin premio este sábado a la película ‘El Agua’, rodada en la Región de Murcia y la Vega Baja. La obra estaba nominada a Mejor Dirección Novel, de la mano de la cineasta oriolana Elena López Riera, y a Mejor Actriz Revelación por el papel protagonista de Luna Pamies, pero finalmente se fue de vacío.

El filme es un relato inspirado por la DANA de septiembre de 2019, concretamente en las inundaciones que provocó este fenómeno meteorológico en las provincias de Murcia y Alicante. Narra la historia de una herencia familiar enmarcada en el verano más caluroso del siglo y bajo la amenaza de un fuerte temporal sobre un pueblo del Levante español.

El Goya a la Mejor Peluquería y Maquillaje también fue esquivo con el calaparreño Jesús Gil, nominado por su labor en la película ‘As bestas’, que sin embargo arrasó con nueve estatuillas. Tras ser nominado en 2018 por su trabajo en la película ‘Pieles’, de Eduardo Casanova, es la segunda vez que Gil se queda a las puertas de cumplir un sueño que mantiene desde niño. Y es que, como confesó a LA VERDAD semanas antes de la gala, ganar el ‘cabezón’ es su mayor ilusión «desde que tengo uso de razón». Con dos nominaciones en su historial, le tocará seguir trabajando para hacer suyo ese dicho popular que asegura que ‘a la tercera va la vencida’.