José Luis López y Agustín García, en el Faro de Navidad, antes de ir a Marruecos. /
José Luis López y Agustín García se inscriben en la carrera solidaria Desert Trophy para destinar la recaudación a colectivos que trabajan con personas con síndrome de Down
Dos cartageneros cruzarán los desiertos de Marruecos al volante de un viejo Fiat Panda de 1991. José Luis López y Agustín García inician hasta la semana que viene la Desert Trophy, rally solidario en el que solo participan vehículos de este tipo, para destinar toda la recaudación a colectivos que trabajan con personas con discapacidad intelectual. Concretamente, a la asociación marroquí Enfants du Paradis.
Ya son varias las ocasiones en que estos dos cartageneros se ponen a los mandos del Panda para cruzar el desierto del Sáhara. El apoyo de diferentes patrocinadores y las inscripciones a los eventos han servido, en el pasado, para colaborar estrechamente con el colectivo cartagenero Assido, que trabaja con personas con síndrome Down y otras discapacidad intelectuales; y prestar ayuda a la mencionada Enfant du Paradis, renovar equipos informáticos en esta parte del planeta y permitir el acceso a medicamentos y material escolar, entre otros fines.
Esta vez, López y García participan por primera vez en la Desert Trophy, que se retoma después de ser cancelada en 2021 por la situación sanitaria del coronavirus. Este rally tiene especial interés en el cuidado del medio ambiente, la naturaleza y la repoblación, al margen de los fines solidarios de la asociación Cartagena Panda Racing, a la que pertenecen los dos cartageneros.
Los pilotos deben cruzar Marruecos de norte a sur en una semana, con los modelos Panda anteriores al año 2003
En esta carrera, los dos pilotos se enfrentarán durante una semana a un recorrido aproximado de 2.500 kilómetros, en los que cruzarán Marruecos en varias etapas de 500 kilómetros diarios, hasta completar el trayecto en ida y vuelta hasta Nador. Hay unos cien coches participantes, todos con la obligatoriedad ser Panda anteriores al 2003. El de los dos cartageneros es un Fiat Panda 4×4 Sisley de 1991. Aunque es prácticamente nuevo, principalmente, en motor, suspensión y protecciones. «Y ni con esas tienes la garantía de que no te pueda generar problemas», apunta López.
Velocidad de 160 kilómetros
Los requisitos mínimos para participar son: tener experiencia previa en este tipo de carreras, además de conocimientos de navegación, pilotaje y electrónica. Todos los participantes están obligados a pasar una serie de verificaciones antes de la prueba, además de pasar por puntos estratégicos del recorrido y cumplir la velocidad según el trazado, con el riesgo de ser descalificados si lo incumplen.
El Panda de López y García «puede alcanzar hasta los 160 kilómetros en carretera», aunque en la Desert Trophy habrá tramos máximos de 100 y otros de 20, si cruzan por pequeños poblados en el desierto. Todos los participantes tienen herramientas para controlar la velocidad, aunque la organización de la prueba también lo hará. Los pilotos, a diferencia de otras carreras, harán noche en albergues y hoteles ya asignados en la web de la Desert Trophy.
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Enlace de origen : Dos cartageneros cruzarán el desierto marroquí en un Panda
