David V. P. entra en los juzgados de Lorca escoltado por dos guardias civiles en septiembre de 2021. /
El fiscal pide 20 años de prisión para David ‘El Mono’ por asesinar de una puñalada a su vecino en un callejón del Castillo, en Puerto Lumbreras, en septiembre de 2021
José Muñoz Cortés, alias ‘Pepe El Gitano’, murió una fría madrugada de finales de septiembre en las entrañas de un oscuro callejón del barrio del Castillo, en Puerto Lumbreras. Su corazón fue atravesado por la hoja de sierra de un cuchillo que su supuesto asesino utilizaba para cortar el chorizo que se almorzaba todos los días.
Era la segunda puñalada que recibía. La primera laceración llegó de la nada y le pilló con el cuerpo desprevenido. Fue un ataque súbito pero no mortal: por la espalda, en un costado. «¿Quieres más que no veo la sangre?», le espetó su agresor. Acto seguido le asestó la puñalada fatal.
La víctima cayó desplomado en el suelo con una mano, tapándose la herida del pecho. David V. P., alias ‘El Mono’, de 36 años, salió corriendo escalones abajo como alma que lleva al diablo. La mujer de José, Carmen, llegó junto a él y lo tomó entre sus brazos. A su marido se le iba la vida y él lo sabía. «Me ha tocado, me muero», llegó a decirle, mientras ella taponaba con un trozo de la bata que vestía la herida mortal. «Cuida de los niños y de los nietos», le pidió antes de perder el conocimiento. Una vecina acudió en su ayuda, lo montó en su coche y lo llevó al centro de salud de Puerto Lumbreras.
Pasaban las seis de la madrugada. ‘Pepe El Gitano’, de 46 años, murió poco después, a las 8.40 horas de ese 26 de septiembre, en el hospital Rafael Méndez de Lorca, donde lo trasladó una ambulancia desde el centro sanitario.
«No pudo defenderse»
El fiscal pide para David 20 años de prisión por un asesinato con alevosía, ya que considera que el ataque se produjo por la espalda, sin que la víctima tuviera opción a defenderse.
«Lo esperaba escondido en una esquina poco iluminada con el cuchillo en la mano con el que, sin mediar palabra alguna, y con ánimo de acabar con su vida, le asestó dos puñaladas a José sin que este tuviera tiempo alguno para reaccionar y poder defenderse ante lo sorpresivo e inopinado da la agresión, dándole una primera puñalada por detrás, en la zona del costado, y una segunda, en el corazón», expone en el escrito de acusación.
Su mujer, Carmen, llegó y lo tomó entre sus brazos. A su marido se le iba la vida y él lo sabía. «Me ha tocado, me muero»
Además, el representante del Ministerio Público reclama que el acusado indemnice a Carmen, mujer del fallecido, en la cantidad de 99.000 euros; a su hija, de 24 años, en 55.000 euros; a su hijo, de 22 años, en 55.000 euros, y al tercero de los vástagos, de 20 años, en 88.000 euros.
Madrugada de ira y sangre
La madrugada se torció mucho antes de las seis de la mañana. El fiscal basa parte de la acusación en los testimonios que ofrecieron testigos del suceso. Vecinos y vecinas que, alarmados, presenciaron supuestamente la ira que rezumó esa noche David contra José.
El relato arranca entre las 2 y las 3 horas de esa madrugada del 26 de septiembre de hace dos años. ‘El Mono’ se personó en el patio de la vivienda de José, en calle La Pita de Puerto Lumbreras, donde se encontraba junto a su mujer, Carmen. «Hijo de puta, me cago en tus muertos, voy a matar a tus hijos, a tu nieta y a tu yerno», le gritó desde la calle. Al parecer, el origen de las amenazas tuvo que ver con un supuesto robo de marihuana. Una testigo afirmó que escuchó a David diciéndole a Pepe que iba a matar a su yerno porque este le había quitado una planta de ‘maría’.
‘Pepe El Gitano’, salió de su vivienda y fue con David a una placeta, abajo de su casa, cerca de la casa donde vivía el acusado. Se inició una discusión y José le dio un manotazo en la cara a ‘El Mono’, que le provocó una hemorragia en la nariz. El imputado, humillado y herido, «entró en su casa y salió con un cuchillo de los de cortar carne en una mano y una botella de cristal en la otra. Rompió el vidrio y le amenazó diciendo que lo iba a matar a él y a toda la familia», expone el fiscal en sus calificaciones. Viendo que la situación podía acabar muy mal, Carmen llamó a la Policía Local para poner fin a la disputa, momento en el que David se marchó del lugar en su coche.
Al parecer, el origen de la disputa entre los dos vecinos tuvo que ver con un supuesto robo de marihuana
Tras esta pelea, ‘El Mono’ se presentó en la casa del yerno de José, quien presuntamente le había robado las plantas de droga. Llamó a la puerta, le abrió y entró gritando, «te voy a matar», «te voy a taladrar los pulmones». Dos agentes se personaron en la vivienda y trataron de convencer a David para que saliera de la vivienda, pero el acusado se negó.
Los policías fueron reclamados para otro servicio urgente y se marcharon, ya que el dueño de la casa les dijo que no se preocuparan, que lo conocía y que no pasaría nada. Cuando los efectivos policiales se fueron, ‘El Mono’ aprovechó para salir a la calle y se dirigió de nuevo a la vivienda de José. «Maricón, baja si tienes cojones. Me cago en tu puta madre, que la tienes enterrada. Si no bajas aquí, voy a casa de tu hija y mato a tu nieta».
Esa última amenaza fue la que empujó a José a volver a enfrentarse a David. Pero en esta ocasión, no iba a permitir que le tocaran otra vez la cara y lo esperó agazapado en la oscuridad de un callejón donde José Muñoz Cortés, alias Pepe ‘El Gitano’, murió en una fría madrugada de finales de septiembre.
«La puñalada que mató a José fue de frente; no hay alevosía»
David V. P. aseguró en su declaración que esa noche iba bebido y muy drogado. Había estado en un cumpleaños por la tarde y había consumido tres gramos de cocaína y mucho alcohol. Aquella madrugada fue ‘Pepe El Gitano’ el que fue a su casa para reclamarle que le había robado una planta de marihuana. «Él y su hijo comenzaron a pegarme y a darme puñetazos». ‘El Mono’ contó que pudo huir y se escondió en casa de su madre. Una vez allí, una vecina le mandó un mensaje a su hermana advirtiéndole de que Pepe le estaba buscando para matarle. De regreso a su vivienda se topó con él y, según su versión, su vecino vino a su encuentro.
«Cogí el cuchillo que uso para almorzar, para cortar el chorizo», explicó al juez. El acusado manifestó que mostró a Pepe el cuchillo que llevaba en una mano, pero este decidió atacarle. «Yo no le clavé el cuchillo. Él se abalanzó sobre mí y se pinchó», indicó en sede judicial. El abogado Manuel Maza, que asumió la defensa de David, afirma que la herida que provocó la muerte a la víctima fue en el pecho. «Este hecho prueba que difícilmente la puñalada se la diera por la espalda, motivo por el cual no existiría la alevosía». En este sentido, el experto penalista indica que en todo caso se trataría de un homicidio en el que concurriría una atenuante por el estado de embriaguez y drogadicción en el que se encontraba David. Asimismo, Maza señala que la agresión puede entenderse como una legítima defensa, «ya que fue José el que salió en busca de David».
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Enlace de origen : El acusado de matar a 'Pepe El Gitano': «¿Quieres más que no veo la sangre?»
