Dani Alves seguirá en prisión

Dani Alves seguirá en prisión

Dani Alves.. / Afp

Los magistrados de la Audiencia de Barcelona desestiman el recurso del futbolista contra la decisión de la jueza de enviarle a la cárcel acusado de violación

Dani Alves deberá seguir en la cárcel. La sección tercera de la Audiencia de Barcelona ha decidido este martes que el futbolista deba seguir en prisión. La justicia ha desestimado el recurso interpuesto por la defensa del futbolista y ha confirmado la situación de prisión provisional comunicada y sin fianza.

El tribunal considera que «comparte con las acusaciones que concurre un elevado riesgo de fuga vinculado por una parte a la elevada pena que puede serle impuesta en la presente causa, los severos indicios de criminalidad contra el mismo y la capacidad económica abultada que le permitirían como hemos dicho abandonar España en cualquier momento».

La Audiencia Provincial descarta también que las medidas alternativas a la prisión provisional que propone la defensa sean suficientes para neutralizar el riesgo de fuga que hemos calificado como elevado. «La imposición de una fianza, por cuantiosa que fuera, no supone una vinculación al proceso de aquel que dispone de un abultado patrimonio como ya hemos indicado», según la justicia. A su juicio, las presentaciones periódicas ante la justicia y la retirada del pasaporte «no constituyen garantía suficiente». «Nada impediría a Alves salir de España por vía aérea o marítima o incluso terrestre sin documentación y llegar a su país de origen y nacionalidad y mantenerse en Brasil sin ese pasaporte a sabiendas que no sería entregado a España ni a través de órdenes internacionales de detención o extradición».

«Tampoco podemos acoger como medida neutralizadora del riesgo de fuga los dispositivos telemáticos. Estos no tienen como finalidad geolocalizar a aquel que la lleva instalada, sino proteger a la víctima y evitar que una orden de alejamiento sea incumplida. Como bien indicó la fiscal, dichos dispositivos no impiden el control en fronteras que sería lo importante», afirma la justicia. «Si bien existen dichos dispositivos en otros países, y podría ser un instrumento útil para evitar el ingreso en prisión provisional, en España no están previstos ni tienen esa función de geolocalización de los investigados que pretende la defensa», remata.

La Audiencia Provincial celebró el jueves pasado una vista para resolver un recurso presentado por el exjugador del Barça y del Sevilla, que pidió su puesta en libertad provisional. La sección tercera de la audiencia provincial abordó el caso con los abogados de las partes. Ni la víctima ni el presunto violador estuvieron presentes.

Alves, investigado por supuesta agresión sexual a una joven de 23 años en una discoteca de Barcelona el pasado 30 de diciembre, lleva entre rejas desde el 20 de enero. Su abogado, Cristóbal Martell, recurrió el auto que ordenó su ingreso en prisión. El juzgado de instrucción número 15 de Barcelona, decidió enviarle a prisión al ver indicios de criminalidad y por el elevado riesgo de fuga. Dos fueron los argumentos de la magistrada para ver riesgo de fuga: su capacidad económica y la falta de acuerdos de extradición entre España y Brasil. La Audiencia de Barcelona ratifica estos argumentos.

La letrada de la chica que denunció al futbolista y el Ministerio Público rechazaron su puesta en libertad, mientras que el abogado del presunto violador defendió su excarcelación. La Fiscalía y la abogada de la víctima esgrimieron que sigue existiendo riesgo de fuga. El futbolista tiene sociedades en Brasil, donde viven sus hijos. La víctima y la Fiscalía temen un nuevo caso como el de Robinho. El ex del Madrid y del Milan fue condenado por violación en Brasil pero nunca ha cumplido la pena porque vive en Brasil y no ha sido extraditado. La letrada argumentó además que una excarcelación a solo un mes del ingreso en prisión «sería un ataque a la integridad psicológica de la víctima». «Lo que no puede ser es que él esté en libertad mientras la víctima tiene que estar encerrada», dijo la abogada de la víctima, Ester García.

Según la Fiscalía, «existen indicios suficientes de la comisión de un delito de agresión sexual con penetración y un grave riesgo de fuga». El Ministerio Público considera que «existe un grave riesgo de fuga por cuanto Alves es nacional de Brasil, dispone de un muy elevado patrimonio que le permitiría asegurar su fuga y no tiene arraigo suficiente en España». «Las medidas alternativas propuestas por su defensa no son suficientes para garantizar que se encuentre a disposición de los Tribunales españoles durante toda la tramitación de la causa», ha rematado.

El abogado de Alves, en cambio, trató de acreditar que no existe riesgo de fuga. El argumento que puso sobre la mesa es que Alves regresó de México, donde jugaba, a Barcelona de manera voluntaria para declarar ante los Mossos y la jueza de instrucción. Ofreció además algunas medidas para acreditar que no huirá, como entregar sus dos pasaportes (español y brasileño), llevar una pulsera telemática para estar siempre localizable, además de comparecer de forma periódica en el juzgado. Martell destacó que su cliente tiene arraigo en España, donde está empadronado desde 2010. Entre los argumentos que apuntó está que está casado con una española. Todas estas medidas han sido desestimadas.

Sobre el fondo del caso, sobre hubo o no violación, el abogado del lateral brasileño señaló que «hay razones para dudar». Martell lamentó el «juicio anticipado» contra su defendido. Alves está acusado de haber agredido y violado a una joven de 23 años en la discoteca Sutton, de la capital catalana. Los hechos ocurrieron el 30 de diciembre. Primero dijo que no conocía a la víctima, luego que se cruzó con ella en los baños del local y por último que hubo relaciones, pero consentidas y que fue ella la que le practicó una felación. Las
pruebas de ADN desmontan esta tercera versión, pues han aparecido resto de semen del futbolista en la vagina de la chica. Se ha confirmado que hubo penetración, como mantiene la víctima. Martell cuestionó la versión de la víctima. Su interpretación de los hechos es que hubo sexo consentido. Adujo que la chica no presentó lesiones vaginales. Eso sí, por primera vez
admitió ante el juez que hubo sexo con penetración, con consentimiento. La víctima dice que fue una violación. El diario Ara publicó ayer que el futbolista habría cambiado de nuevo de versión. La quinta mantiene que es ella la agresora y el brasileño, la víctima, y que si no la había defendido hasta ahora era para proteger a la chica. «Quería proteger a la señorita», según el jugador.

Enlace de origen : Dani Alves seguirá en prisión