Francisco Guillem, el socialista que vuelve a la política después de 40 años

Francisco Guillem Castaño, quien fuera el primer alcalde de Yecla en la democracia, vuelve a la política en los primeros puestos de la lista del PSOE a las municipales de mayo. Cuarenta años después, vuelve un histórico socialista a la primera línea de la política. Y lo hace a sus 71 años de la mano del recientemente elegido secretario general de los socialistas yeclanos, Cristóbal Ruiz.

–¿Por qué vuelve a la política?

–Porque me gusta. Me apasiona lo público y lo municipal. Y también porque tengo tiempo. Mi experiencia en la política y en el terreno laboral pueden sumar en el proyecto socialista.

–¿Por qué ahora sí y no antes?

–Fundamentalmente, por mi trabajo. Yo tenía una empresa a la que tuve que dedicarle la vida. Para mí era una gran responsabilidad. Y también es cierto que ahora hay una gente muy ilusionada en el PSOE.

–Pero la política de ahora no es la que usted vivió en los años ochenta.

–Yo tampoco tengo nada que ver; era otra persona. Creo que he evolucionado, porque si no lo haces, es que eres un imbécil. Creo que la política ha ido a peor en algunas cosas, pero quiero que traigamos respeto, sosiego… cosas que yo pienso que he ido utilizando en mi vida y la verdad es que no me ha ido tan mal.

–Dicen que usted era antes una persona muy inflexible, ¿lo sigue siendo ahora?

–Soy otro. Entonces tenía 27 años. Veníamos de una dictadura y la situación era completamente diferente. Estos años de vida laboral, las conversaciones que he tenido con la gente y la experiencia que me ha dado estar al frente de una empresa han hecho que aprenda mucho. Sobre todo, esos años me han enseñado que las cosas se solucionan con la participación de las personas.

–En los ochenta fue condenado por un delito que cometió cuando era alcalde de Yecla.

–Me pusieron hasta diecisiete querellas en aquella época. Hubo una denuncia que a mí me causo mucha preocupación porque estuvo muy bien orquestada por dos abogados de Yecla. Fue la expropiación que el Ayuntamiento llevó a cabo de unas casas-cueva que había en el antiguo colegio La Pedrera. Nosotros llamamos a todos los propietarios que conocíamos. No hubo que expropiar a ninguno porque se llegaron a acuerdos con los propietarios y se les pagó. Pero apareció un propietario con una querella contra mi persona, no contra el alcalde.

–Continúe, por favor.

–Él y los abogados llevaron testigos que no había visto en mi vida y lo plantearon como que yo había hecho un abuso de poder porque había ocupado una propiedad suya sin pagarla. El dueño fue indemnizado, pero no se me apartó de la política. No hubo una condena de inhabilitación porque, repito, la querella fue contra mi persona, no como alcalde. Eso fue en el año 1984 y seguí de alcalde. Y lo mejor de todo es que se levantó el colegio de La Pedrera.

–¿Qué opinión le merece el hecho de que los populares lleven ganando las elecciones desde hace 28 años?

–El PP, desde sus inicios, ha trabajado con un interés partidista. Con todo lo que hace y subvenciona deja entrever que ‘esto te lo hago yo y lo tienes que pagar’. El que recibe la subvención lo necesita y el que da la ayuda suele recordárselo. Y luego está la idiosincrasia de este pueblo. Su propio aislamiento es fundamental para entenderlo.

–¿Qué parte de culpa tiene la izquierda de que el PP siga ganando los comicios?

–Seguramente mucha. Los dirigentes del PSOE de Yecla han estado durante muchos años más preocupados de matarse entre ellos que de salir a la calle y dar una alternativa.

–A lo mejor el destino quiere que sea usted, 40 años después, quien vuelva al Ayuntamiento para aprobar el nuevo Plan General de Ordenación Urbana.

–Yo no, en todo caso sería la corporación municipal. Pero, sin duda, es muy gracioso que 40 años después el PSOE pusiera en marcha un nuevo plan general, después de haber estado tantos años el PP gobernando el municipio con mayorías.