Una red de agua regenerada y pluvial permitiría recuperar la mitad de la recortada por el Trasvase

De los 128 hectómetros cúbicos que recibía Alicante vía Trasvase, tras el recorte aprobado por el Gobierno central solo le quedará un 30% de esa cifra, apenas 38 hectómetros. Un hachazo sin parangón que podría verse subsanado en gran medida si prosperan los recursos judiciales presentados y, aparte, si se realizara una enorme inversión en infraestructuras hidráulicas, afirma un estudio de Asaja al que ha tenido acceso LA VERDAD. En él, la asociación de jóvenes agricultores considera perentoria la necesidad acometer una red de embalses de agua regenerada y pluvial interconectados que vertebren la provincia de norte a sur.

De ese modo, Alicante, solo mediante la regeneración, podría recuperar casi la mitad del agua perdida, 47 hectómetros de los 93 que se quedarán en el Tajo. A los que se podrían sumar otros 30 hectómetros extra si, según Asaja, prospera favorablemente la batalla legal. Una situación que devolvería a Alicante a una situación de competitividad agrícola más asumible para los regantes y más similar a la que había antes de que se decretara el hachazo al acueducto.

En el caso de la Vega Baja, que aglutina el 50% de la renta agraria de la provincia, apenas le quedarán 12 de los 25 hectómetros cúbicos que recibía del Trasvase. En la comarca, el estudio incide en la mejora del uso de las aguas regeneradas y pluviales de Torrevieja y Orihuela Costa, así como la reutilización de las aguas depuradas de Orihuela, Bigastro, Algorfa y Crevillente. En este último caso, denuncian que, pese a que las aguas de esas depuradoras ya están concedidas a varias comunidades de regantes, todavía no se han acometido las obras para hacérselas llegar.

En Torrevieja y Orihuela Costa, Asaja pide conducir aguas pluviales y los picos de producción de agua regenerada a tres embalses y, desde estos, hacerla llegar a los regantes de la zona de La Pedrera. «Los estudios previos de Tragsa cifran en 6 hm3 la cantidad de agua que podría llegar a los regantes, de los que cuatro son pluviales y tres de las depuradoras pendientes de ser usadas para el regadío», dice el estudio.

Asimismo, Asaja contempla propuestas para la mejora del uso de las aguas regeneradas del entorno de Alicante ciudad mediante un proyecto de ‘Vertido Cero’ al mar y otras mejoras del uso de las aguas regeneradas de la costa norte de la provincia y el Bajo Vinalopó.

Todas las propuestas están encaminadas a constituir una comunidad de usuarios de aguas regeneradas en toda la provincia, que sería efectiva siempre y cuando la batalla judicial contra el recorte del Tajo-Segura acabe prosperando. «El Trasvase es irrenunciable. Estas medidas están encaminadas a evitar daños económicos irreversibles», recalca el presidente provincial de Asaja, José Vicente Andreu.

Eje hídrico provincial

En este sentido, Asaja enumera una serie de infraestructuras urgentes para crear esa red de riego con aguas regeneradas. La más ambiciosa y fundamental es la construcción de una tubería desde Denia-Benidorm hasta Benferri y La Murada, con conexión en el Bajo Vinalopó que actúe como eje hídrico vertebrador de la provincia.

Aparejado a esto, Asaja apuesta por establecer una red de embalses conectados por dicha tubería, uno por cada estación depuradora (Edar), para que el excedente de cualquier zona lo pueda usar el resto. Y propone como zonas para ubicar las presas: Denia, Benidorm, Altea, Villajoyosa, Muchamiel, Bacarot, Elche / Crevillente y, uno de cola, en La Murada. Todos con un control digitalizado.

Asimismo y por la peculiaridad agrícola del entorno de La Pedrera, Asaja propone realizar cuatro embalses, dos de recogida de pluviales y dos para la regulación de los volúmenes recogidos, y una tubería con contadores digitalizados para distribuir el agua a las comunidades de regantes. También que las Edar de Bigastro-Jacarilla, Orihuela, Algorfa y Benijófar estén conectadas con las comunidades de La Pedrera.

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