Noche para la supervivencia de un UCAM que necesita a su público

Como mínimo, y pase lo que pase, no habrá más Champions en el Palacio en la 2022-23, ya que después de la eliminatoria de cuartos de final solo queda la ‘Final Four’ y las ciudades candidatas son Málaga, Atenas y Jerusalén. Aún quedan más de 1.000 entradas disponibles a la venta, Bando de la Huerta mediante. Este factor, el del público, es uno que el UCAM necesita como el comer. En el primer partido de la serie se encontró un Carpena lleno hasta la bandera, con 13.000 almas empujando en favor de un Unicaja que es uno de los máximos favoritos a levantar el trofeo de campeón.

Con poco más de la mitad, pues la capacidad máxima del Palacio está en los 7.300 espectadores, el pabellón murciano tiene que hacer valer su fuerza: el UCAM ha ganado sus últimos 16 partidos como local en la Champions (está a solo uno de igualar el récord histórico de 17 del Mónaco, hoy equipo de Euroliga) y fue vencedor del último precedente entre los dos equipos en Murcia, cuando, en Liga Endesa, el equipo de Sito Alonso derrotó al de Ibon Navarro 85-80 hace justo un mes. Y, especialmente en la competición doméstica, el UCAM se está mostrando dependiente de un público a favor, pues lleva casi tres meses sin ganar fuera de casa, donde, cuando pierde, lo hace por una diferencia media en torno a la veintena.

Otro factor a tener en cuenta hoy es el del arbitraje, en el punto de mira después de las incendiarias declaraciones de Alejandro Gómez previas al comienzo de la eliminatoria. A los murcianos no les gustó nada la apertura del primer partido, con un criterio muy permisivo que siempre beneficia al equipo más físico de los dos, en este caso un Unicaja pleno de músculo en todas las posiciones, como gusta a su entrenador. Con los murcianos haciendo aguas a las primeras de cambio, el partido se caldeó a partir del penúltimo rifirrafe entre Barreiro y Rojas, que terminó con el universitario en el parqué a violento zarandeo del primero, descalificado. A breves instantes del final, una falta a destiempo de Rojas sobre Carter levantó los gritos de «asesino» de un sector del Carpena.

Tormenta de acontecimientos negativos que mantienen la eliminatoria echando chispas, con sucedidas batallas entre aficionados en las redes sociales, si bien algunos de los más representativos de ambas masas sociales están haciendo por apaciguar los ánimos para un partido que, se pretende, sea un destacado evento más de estas Fiestas de Primavera.

Debut de Chiozza

Por si faltaba un extra de picante, este lo puso el fichaje del ex NBA Chris Chiozza. El límite para inscribir jugadores en la Champions terminaba el pasado 3 de abril a las 23.53 y el UCAM anunció oficialmente su contratación el 4 por la noche, solo un rato después de perder en Málaga. Lío servido. El jugador estaba más que fichado por el UCAM desde el lunes 3, pero no su inscripción en la competición europea, pues a última hora de la noche seguía sin llegar un último documento. El UCAM presentó todo a excepción de este último requerimiento, pidiendo a la Champions una prórroga que le fue concedida. Pero el Unicaja pretendió impugnar su inscripción, quedando el caso resuelto a favor de los murcianos.

Así, Chiozza, que llegó a Murcia el pasado domingo, hizo su primer entrenamiento el lunes y fue presentado ayer martes, debutará hoy como jugador de Sito y con la misión de, a pesar de medir 1,80 metros, ofrecer unas garantías defensivas en las naufragan McFadden y Trice. Este último, el gran señalado con el fichaje de Chiozza, sí podrá jugar hoy, como también podrá hacerlo Anderson. La Champions permite alinear a tres extracomunitarios en una convocatoria.