Libertad con cargos para un profesor acusado de tocamientos a varias alumnas en Totana

Libertad con cargos para un profesor acusado de tocamientos a varias alumnas en Totana

Alumnas que cursan 2º de Bachillerato en el instituto Prado Mayor de Totana no se sorprendieron ayer cuando se enteraron de la detención del profesor que el año pasado les había dado clases de Educación Física, por supuestas agresiones sexuales a una docena de compañeras del centro educativo. Es más, aseguraron a la salida de clase, llevaban al menos desde hace seis años escuchando rumores de los presuntos excesos del docente con sus alumnas.

El profesor fue detenido el lunes por la Guardia Civil tras recabar varias denuncias de tocamientos a alumnas y la titular del juzgado de guardia de Totana decretó ayer su puesta en libertad con cargos por presuntas agresiones sexuales a menores.

«Desde que entré al instituto hace seis años, ya se rumoreaban algunas cosas sobre él y siempre nos hemos preguntado por qué nadie hacía nada». Esta chica, que prefiere no decir su nombre, asegura que con ella no tuvo comportamientos inapropiados, «aunque sus clases eran muy incómodas, porque te venía por detrás para mirarte cuando hacías un ejercicio y también por el modo que tenía de cogerte».

Una compañera de esta joven recuerda que a ella misma y a amigas suyas sí les llegó a hacer algún tocamiento que, a su entender, excedía a su labor de docente, que daba clases a estudiantes de ciclos de la ESO y 1º de Bachillerato, entre 13 y 16 años. «Cuando hacíamos estiramientos, te tocaba por zonas que no debía. En lugar de cogerte por la cintura, te agarraba por la zona más baja de las caderas; o por la parte del pecho, en lugar de por las axilas». El profesor estuvo de baja buena parte del curso «por problemas personales» y se reincorporó hace unas semanas, explican las chicas.

El testimonio de una menor «a la que le habría hecho algo que le incomodaría» llegó a oídos de otro docente, «el que lo ha movilizado todo desde Semana Santa», aseguran las estudiantes.

Otro educador intervino

Las chicas explican que este profesor, que imparte otra materia en el centro educativo, se puso en contacto con alumnas y exalumnas del profesor de Educación Física para preguntarles si habían tenido algún problema con él.

«A nosotras y a todo nuestro grupo de amigas nos contactó para preguntarnos. Le dijimos que con nosotras no había habido nada, pero que sabíamos desde hacía años que muchas otras chicas sí comentaban que se sobrepasaba en las clases. Hubo al menos veinte zagalas que se lo confirmaron. Una le dijo que le había tocado en la ingle; otra que se metiera con él al despacho…».

Este aspecto fue comentado ayer por el alcalde del municipio, Pedro José Sánchez, quien indicó que, de confirmarse los hechos, podrían haberse producido «no solo este curso». El regidor totanero apuntó, además, que fue la Policía Local de Totana, a través de la figura del agente tutor, la que dio la voz de alarma a la Benemérita hace dos semanas, tras tener conocimiento de las sospechas de tocamientos del docente.

«En este caso, ha sido muy importante una figura como la del agente tutor que tenemos en el Ayuntamiento de Totana, es decir, una relación que tiene un miembro de la Policía Local con los jóvenes de la localidad, sin que necesariamente estén adscritos a centros educativos», explicó el regidor totanero en una rueda de prensa. «Las mismas chicas que hablaron con el profesor aprovecharon alguna charla con el agente para contarle lo que pasaba», añade una de las jóvenes.

Con los indicios en la mano, los investigadores de la Policía Judicial tomaron declaración a las alumnas del centro a lo largo de la semana pasada, ampliándose, al parecer, la cifra de adolescentes que relataron haber sufrido esos supuestos tocamientos. Finalmente, el docente fue detenido el lunes por la tarde por presuntos delitos de agresión sexual.

Alejamiento a 300 metros

La titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Totana ordenó ayer la libertad provisional para el profesor de Educación Física acusado de los presuntos delitos de agresión sexual -y no de abuso sexual, en aras de la nueva ‘ley del solo sí es sí’-. Tras escuchar su declaración, le impuso la obligación de comparecer cada 15 días en el juzgado.

La magistrada le prohíbe, además, que se acerque a menos de 300 metros de las menores en cualquier lugar donde se encuentren, así como de comunicarse con ellas mientras dure la tramitación de la causa abierta.

«No hay constancia de quejas ni de denuncias previas del centro»

La Consejería de Educación explicó ayer a LA VERDAD que está a la espera del avance de la investigación por parte de la Guardia Civil. Este organismo, remarcaron fuentes del mismo, no tiene constancia previa de quejas ni denuncias ni del centro ni de la comunidad educativa. Según explicaron las fuentes, las actuaciones administrativas de la Consejería están supeditadas, en todo caso, a las medidas judiciales que pudieran adoptarse. El consejero se puso en contacto con el director del centro. El organismo puso a disposición del instituto el servicio de prevención de riesgos laborales y el observatorio de la convivencia, con el fin de atender las necesidades y prestar apoyo al equipo directivo, al claustro de profesores y a la comunidad educativa.

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