Épica y resistencia en la despedida del Warm Up 2023

Épica y resistencia en la despedida del Warm Up 2023

Con un ojo puesto en el escenario y otro en el cielo. Así se vivió el último día de una quinta edición del Warm Up que hizo lo que pudo para, sin éxito, esquivar la sombra de su (tristemente) inolvidable jornada de sábado. Quisimos la venganza contra la lluvia torrencial y el temporal que nos dejó con ropa empapada y a lo loco. Adquirimos gustosamente el compromiso de disfrutar el doble por lo perdido tras el paso de la tormenta. En definitiva, soñamos con volver a situar las estrellas a la altura de las canciones y no de las nubes. Y solamente fue posible gracias a un conjunto de directos tan espléndidos como los que abrieron la cita de este domingo en La Fica. Un viaje de ida, revolución y déjà vu cuyo punto de partida nos situó frente a la figura de un gigante llamado Iván Ferreiro.

El mejor Ferreiro

Había ganas de comprobar si las canciones del maravilloso ‘Trinchera pop’ mantenían su encanto en directo, incógnita que quedó resuelta de la manera más positiva posible a lo largo de un concierto que, por encima de todo, dejó claro que el presente y el pasado de Ferreiro dialogan desde la comprensión, el entendimiento y la fluidez. Acompañado por una fantástica banda de la que formó parte el mismísimo Leiva como ilustre bajista en la que fue una de las grandes sorpresas del día, el gallego se mostró tan conectado como de costumbre a un repertorio en el que piezas recientes como las monumentales ‘En el alambre’, ‘La humanidad y la tierra’ y ‘En las trincheras de la cultura pop’ demostraron que pueden mirar a los ojos y sin miedo a clásicos tan queridos como ‘Turnedo’, ‘El pensamiento circular’, con el citado Leiva, ‘M’ o (pelos de punta) ‘Años 80’. La sensación, una vez más, es que Ferreiro se encuentra en un radiante estado de inspiración. Y casi que en el mejor momento de su carrera, que ya es decir.

La estampida

Y llegó la estampida. Y los truenos. Los Carolina Durante han necesitado solamente dos discos largos y tres EPs para ubicarse en un codiciado terreno de la escena de rock patrio donde la crítica, industria y público coinciden en el aplauso. ¿Lo mejor? Que no hay trampa ni cartón en un discurso que termina de estallar y arrebatar sobre las tablas. De la primera nota a la última, Carolina Durante fueron energía, agitación, grito y mucha y buena melodía en un concierto donde los dientes del diluvio hicieron acto de presencia. Eso sí, cada una de las gotas presentes durante su actuación, más allá de provocar numerosas carreras hacia la salida, aumentaron de forma considerable la épica de un grupo que hizo de cada relámpago un triunfo. Por lo caótico, desafiante y entusiasta, el concierto de Carolina Durante ya es historia del festival, igual que, aunque sea por motivos muchos menos alegres, la cancelación por problemas técnicos de la esperada actuación de los británicos Kooks, sustituidos por un voluntarioso Carlos Sadness que, armado con su reiterativo y ligerísimo pop tropical, animó un poco el ánimo general.


Rocío Márquez y Bronquio dándolo todo bajo la lluvia, Carlos Sadness y el cantante de Carolina Durante.

Imagen principal - Rocío Márquez y Bronquio dándolo todo bajo la lluvia, Carlos Sadness y el cantante de Carolina Durante.

Imagen secundaria 1 - Rocío Márquez y Bronquio dándolo todo bajo la lluvia, Carlos Sadness y el cantante de Carolina Durante.

Imagen secundaria 2 - Rocío Márquez y Bronquio dándolo todo bajo la lluvia, Carlos Sadness y el cantante de Carolina Durante.

Estribillos para arrancar

Para terminar con un mejor sabor de boca, va, recordemos otra alegría. En los primerísimos compases de la tarde, tanto Marta Movidas como las componentes de Cariño lograron algo tan complicado como salir vencedoras de su lucha a vida o muerte con un horario bien tempranero gracias a un buen puñado de estribillos orientados a la adicción. Misión cumplida. Seguimos tarareando sus melodías horas después de la finalización de un concierto con el que iniciamos el recorrido de una convulsa y extraña última jornada que, entre tormentas y tormentos, logró escribir a duras penas la despedida de una edición del Warm Up que nunca olvidaremos. Aunque lo primero que nos traiga de recuerdo, con toda probabilidad, sea un contundente resfriado y las ganas de tomarnos un té para entrar en calor.

Enlace de origen : Épica y resistencia en la despedida del Warm Up 2023