La dificultad de acceso a la vivienda está cambiando el modo de vida de los españoles que, a la fuerza, están optando por las viviendas en alquiler, dejando de lado la propiedad; y, solo los que pueden, manteniendo segundas residencias para tomarse descansos en sus vacaciones. Esa es la nueva radiografía de la vida de los ciudadanos, que han visto cómo el incremento de precios de los pisos y casas propios hace imposible acceder a uno de esos inmuebles, y les obliga a vivir de arrendamiento. Aunque esta radiografía va por barrios y las diferencias entre provincias son, en muchos casos, abismales.
La compra de una vivienda sigue siendo la opción preferente para el 75% de los españoles. Este porcentaje ha caído en la última década, desde casi el 80% de 2011. El incremento de precios inmobiliarios, las nuevas exigencias de la banca para conceder financiación (ya no es posible conseguir más de un 80% sobre el valor de tasación) y la merma de salarios impide a una buena parte de la población acceder a un inmueble propio. Aunque quieran.
Sin embargo, el 26% de quienes tienen casa, aún no ha terminado de pagar, según la Encuesta de Características Esenciales de la Población y Viviendas publicada este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE) con datos a 1 de julio de 2021. Este régimen de tenencia (propiedad con hipoteca activa) ha ido bajando y ha caído casi cuatro puntos en la última década, ya que en 2011 comprendía el 33% de hogares.
Por su parte, el porcentaje de personas con la casa pagada ha descendido levemente, desde el 38,9% de 2011 al 38,1% de 2021. Teniendo en cuenta los datos del INE de 2021, el 10,7% de personas vivía en una vivienda propia recibida en herencia o donación, el 2,8% en una cedida gratuitamente o a bajo precio, y el 6,1% de otra forma. Si se atiende a las comunidades autónomas, entre los hogares con vivienda en propiedad y con hipoteca existen pocas diferencias, aunque los máximos se centran en Madrid (29,8%) y Murcia (29,7%), y el mínimo en Galicia, con un 18%.
Esta situación ha impulsado a una parte de la población, sobre todo jóvenes, a tener que vivir de alquiler. Los hogares arrendados ya rozan el 16% del total, dos puntos y medio más que hace una década, y suponen unos tres millones de viviendas. Pero también aquí las diferencias van por barrios.
Si diferenciamos en cuanto a tamaño del municipio, el régimen de alquiler tiene más peso en las ciudades de más de 500.000 habitantes (básicamente, Madrid, Barcelona, Valencia, Zaragoza, Sevilla y Málaga) , donde alcanza el 22,8% de hogares, frente al 12,4% de los municipios de 50.000 o menos.
Por comunidades autónomas, el alquiler se concentra en Melilla (31%), Baleares (23,4%), Cataluña (23,2%), Canarias (22,1%) y Madrid (19,9%), mientras que los menores porcentajes corresponden a Extremadura (9,4%), Cantabria (11%), Andalucía (11,4%) y Castilla-La Mancha (11,5%).
Otra de las grandes diferencias entre españoles se encuentra en las segundas residencias. El 15,5% de los hogares disponía en el año 2021 de una vivienda de este tipo. Este porcentaje se duplicaba y alcanzaba el 31,2% en los que tenían ingresos mensuales netos de 5.000 o más euros. Por el contrario, se situaba por debajo del 10% en los hogares con ganancias netas inferiores a los 1.000 euros al mes.
Entre los hogares que disponían de segunda residencia, predominaban aquellos en que todos sus miembros eran españoles (94,2%) y en los que ningún miembro del hogar tenía estudios superiores (46,2%).
Por poner algunos ejemplos, Irún (Guipuzcoa), se sitúa a la cabeza de este ranking inmobiliario, ya que casi un 50% de sus hogares que tienen otra vivienda en propiedad. Del total la mayoría, el 72%, se encuentra en otra comunidad autónoma y el resto en el extranjero. Le sigue el municipio más rico de España, Pozuelo de Alarcón, en la Comunidad de Madrid, con un 31,4% de hogares con segunda residencia. Dentro de la comunidad, en tercer puesto se encuentra Leganés con un 27%.
Tras ellos, se sitúan otros municipios cuyos habitantes tienen segundas residencias, como Teruel (con un 26,9%), Coslada (Madrid), con un 26,3%, Bilbao (26%) o Zaragoza (25,2%). En cambio, los municipios que registran menos hogares con segundas residencias se encuentran en las islas, territorios que suelen ser precisamente destino vacacional, como Telde con un 4,3%, Granadilla de Abona con un 4,62%, Arrecife con un 5,7% o Puerto de Santa María (Cádiz) con un 6,18%.
Según el INE, del total el 41% pasa más de 60 días al año en su segunda residencia. Se trata de más de dos meses, que puede ser resultado de vacaciones, fines de semana y puentes. El 28,6% la usan entre uno y dos meses, un 17% pasa entre 15 y 30 días y solo el 13% pasa menos de 15 días.
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Enlace de origen : La vida de los españoles también va por barrios
