La eficiencia energética, el eje sobre el que gira la sostenibilidad de los hogares

La guerra de Ucrania ha puesto sobre la mesa un problema que no es nuevo. El corte de suministro de gas de Rusia a Europa y la subida de precios del petróleo y la electricidad han abierto los ojos a una población que busca más que nunca la eficiencia energética en sus viviendas. Ya sean de nueva construcción o de segunda mano, los hogares españoles se han unido a una tendencia sostenible que va en sintonía con el medio ambiente y que, además, permite ahorrar costes e incrementar el valor de los inmuebles.

Precisamente, sobre este cambio de mentalidad y sobre las medidas relacionadas con eficiencia energética que se están tomando a nivel público y privado fue sobre lo que versó el desayuno informativo ‘Eficiencia energética en viviendas: menor consumo para un mayor valor de futuro’. El encuentro, organizado por LA VERDAD y BBVA y moderado por el jefe de Fin de Semana de este periódico y experto en medio ambiente, Miguel Ángel Ruiz, contó con la presencia del consejero de Fomento e Infraestructuras, José Ramón Díez de Revenga; el director general de Vivienda, José Francisco Lajara; el responsable de Transformación Digital en la Territorial Este de BBVA, Jorge Gil, y la product manager Smart Clima de Iberdrola, Sara López.

La compleja situación del parque de viviendas español fue el eje inicial sobre el que versó el encuentro. El representante de BBVA, Jorge Gil, puso sobre la mesa el carácter «obsoleto» de los inmuebles del país, que cuentan con una «edad media de 47 años». El profesional, además, subrayó tres datos muy importantes: el 40% de las viviendas de cuatro plantas o más no disponen de ascensor; más del 80% tienen calificación energética entre E y G, que son de las más bajas, y la mitad de los edificios son anteriores a 1980, una época «en la que los criterios de construcción no buscaban la comodidad ni había tantos avances».

Para revertir esta situación, la Unión Europea ha impulsado una política verde que, entre otras líneas de actuación, contempla la mejora de la eficiencia energética de los hogares mediante numerosas ayudas canalizadas a través de los fondos ‘Next Generation’. Estas medidas han creado, en opinión de José Ramón Díez de Revenga, una «industria de la rehabilitación» que está dando sus primeros pasos y que posibilitará «que haya más viviendas en el mercado. Si estamos viendo que el gran problema es la falta de oferta, en lugar de seguir invadiendo suelo y construyendo lo que se puede hacer es transformar las que tenemos, que son energéticamente deficientes y poco confortables, para reutilizarlas», indicó. Entre las actuaciones que se realizan en los inmuebles, Sara López destacó la importancia de, principalmente, aislar los edificios y sustituir las fuentes de energía procedentes de combustibles fósiles por renovables, porque «el 50% de la energía que se utiliza en Europa es para calentar la vivienda».

En la Comunidad, este trabajo por la eficiencia se ha traducido en una amplia gama de ayudas, apoyadas en los fondos ‘Next Generation’, a las que pueden acceder «en torno a 590.000 viviendas de las 790.000 que tenemos en la Región de Murcia», aclaró José Francisco Lajara, una idea que también enfatizó el consejero de Fomento e Infraestructuras, quien animó a la gente a tomar un papel protagonista en la mejora de sus viviendas, porque «estamos en un momento único. Hay que aprovechar la oportunidad que tenemos delante, porque los incentivos no van a estar siempre», comentó.

Entre las ventajas que supone sumarse a estos programas para rehabilitar las viviendas, los expertos remarcaron la mejora del confort en el hogar y el gran ahorro en las facturas de suministros como la luz o el gas, «además del aumento del valor de una vivienda tras obtener una mejor calificación energética», añadió Jorge Gil.

Frente al aspecto económico, la product manager de Iberdrola no dejó pasar la oportunidad para destacar también el valor de estas acciones para el medio ambiente. «Hay que reducir emisiones si no queremos tener un futuro bastante difícil. Tenemos un compromiso con Europa para conseguirlo», resumió.

Hacerlo fácil

Tras la puesta en marcha de las diferentes subvenciones, las administraciones y las entidades privadas deben hacer ahora un trabajo de concienciación para que los ciudadanos conozcan estas oportunidades y se animen a sumarse a ellas. En este sentido, el consejero de Fomento e Infraestructuras consideró esencial «hacer sencillo el procedimiento y explicarlo con claridad». Para ello, el Gobierno regional ha aglutinado toda la información de estos programas de ayudas en vivienda.carm.es, una web «donde aparecen todos los pasos que hay que seguir, los requisitos y plazos, y se responden las preguntas frecuentes que nos hace la gente», explicó José Francisco Lajara. Al hilo, Díez de Revenga destacó la agilidad del procedimiento e indicó que las las ayudas se están concediendo «en un plazo de 2 o 3 meses».

Una vez que se decide reformar una vivienda, no hay nada mejor que estar guiado por profesionales que se encarguen de todo, tanto de solicitar las subvenciones pertinentes como de gestionar todas las obras. Este es precisamente el trabajo del agente rehabilitador, una figura «que Iberdrola tiene en toda España y que es fundamental para que las personas no tengan que hablar con los diferentes actores implicados. El agente lo gestiona todo con la Administración, busca la financiación y realiza proyectos llave en mano», indicó Sara López.

Esta figura también es clave en BBVA, una entidad que hace año y medio adaptó sus productos financieros y creó dos muy específicos: préstamos para comunidades de propietarios y préstamos de eficiencia energética, con un plazo de amortización que puede llegar hasta los 10 y 8 años respectivamente. Además ofrece un servicio ‘llave en mano’ de rehabilitación de viviendas gracias a su colaboración con socios tan importantes como Iberdrola. «Como se puede ver, la sostenibilidad es prioritaria dentro de las estrategias de BBVA», concluyó.

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