La falta de acierto condena al Jimbee

No es el Movistar Inter un rival que se le da demasiado bien al Jimbee Cartagena. Siempre le han puesto difíciles las cosas los del Jorge Garbajosa a los dirigidos por Duda. La camiseta pesa, como decía el propio técnico brasileño en la previa del encuentro de este miércoles. No es para menos: 14 títulos de liga en su historia y dos finales esta misma temporada eran motivos suficientes para intimidar en la previa, a pesar de que los telefónicos no habían rendido a su mejor nivel en la liga regular.

El primer tiempo fue el prototípico de un encuentro de ‘playoff’, en el sentido estricto de la palabra. Un duelo cerrado, con muy pocas oportunidades y donde el mínimo fallo podía provocar que el rival se adelantase.

La electricidad de los anteriores partidos como local del conjunto melonero frente al Barça y ante el Palma Futsal nunca llegó a aparecer con relativa constancia, pues la férrea defensa interista complicaba mucho las cosas a los de Duda. Además, Fits, con su corpulencia y su potencia en los duelos, se convertía en una auténtica amenaza.

El pívot visitante tuvo dos de las tres opciones más claras del primer tiempo. Un disparo a bocajarro lo repelió Chemi y otro, en dos tiempos, lo envió rozando el palo derecho de la portería del mazarronero. Más clara aún la tuvo Sepe, quien reventó el travesaño desde diez metros tras una excelente acción combinativa de los de Pato. Sin embargo, la más clara de los interistas tuvo lugar tras un despeje de Chemi que dio en la espalda de Luçao y que se estrelló en el palo.

Pero el Jimbee también tuvo las suyas, y fueron algunas de ellas bastante claras. Luçao, siempre preciso y eléctrico, generó el primer claro desequilibrio local en un contragolpe en el minuto 6. Su remate se fue arriba por muy poco. En este tipo de acciones era en las que más amenazaba el conjunto de Duda y así llegaron las más claras del primer acto para el Jimbee.

Javi Mínguez, en una rapidísima transición, envió la pelota con potencia a la portería rival, pero Jesús Herrero hizo el primer paradón de la tarde. Además, de nuevo el madrileño, probándose desde media distancia, golpeó el palo izquierdo a falta dos minutos para el tiempo de asuesto. Antes de eso la había tenido muy clara Luçao, en un saque de esquina que le dejó absolutamente solo frente a Jesús Herrero. El brasieño, con un flojo cabeceo, fue incapaz de superar a Herrero.

El primer acto concluyó con la sensación de que el primero que anotase un gol iba a estar mucho más cerca de la victoria debido a lo complicado que era acercarse a la portería del enemigo tanto para un equipo como para otro.

Un golpe duro

Arrancó mejor el segundo tiempo el Jimbee Cartagena, pero, después de varias claras ocasiones a favor, recibió el primer mazazo, decisivo para el desarrollo del resto del enfrentamiento. Lazarevic se plantó solo en el ala izquierda y, con una maravillosa vaselina, superó a Chemi para poner por delante a los visitantes en el primer disparo que realizaban en el segundo acto.

Hizo daño el gol a los locaels, que pasaron unos minutos en la lona. Les costaba a los de Duda generar oportunidades de gol, mientras que los visitantes tenían nuevas opciones, especialmente al contragolpe.

Sin embargo, en una acción aislada, Javi Mínguez puso a soñar al Palacio de los Deportes de Cartagena. El madrileño, desde diez metros de distancia, se sacó un tremendo zapatazo que reventó la escuadra de Jesús Herrero. Era el 1-1 y faltaban diez minutos para el final. Todo podía pasar en ese momento.

Se vino arriba la grada cartagenera y Pato, inteligentemente, paró el encuentro para bajar las pulsaciones de los locales. Continuaron apretando los de Duda, conscientes de que se encontraban en el momento ideal del partido, con la presión ambiental a favor. Pero Martel pilló desprevenida a la zaga melonera en un contragolpe, recorrió 15 metros de lado a lado de la pista, y definió con un toque sutil para superar a Chemi. Restaban solamente seis minutos para el final y todo se ponía en contra.

El Jimbee buscó el más difícil todavía y, a falta de cuatro minutos para el final, Duda decidió apostar por el portero-jugador. La apuesta salió peor que en otras ocasiones y, en la primera acción ofensiva, una pérdida provocó un remate al palo de los visitantes. Además, Fits, en un contragolpe, acabó ajusticiando a los de la Avenida del Cantón colocando el 1-3 que, a la postre, sería definitivo, a falta de dos minutos.

Lo intentaron los de Duda, pero no tuvieron el acierto necesario y tendrán que buscar vencer dos duelos consecutivos ante el equipo con más títulos del fútbol sala nacional. Hay argumentos para la esperanza, pues esta misma temporada ya lo hicieron hace apenas unas semanas. El próximo sábado, el segundo duelo.

Menos efectivos

Duda, técnico melonero resumió el partido de la siguiente manera: «El encuentro ha sido equilibrado y disputado, con los dos equipos buscando el gol y sabiendo de la importancia de este. Ellos han estado más acertados en las áreas. Lo que cuenta son los goles y ellos se pusieron dos veces por delante. El tercer gol suyo acaba de mermar la confianza en el portero-jugador.»

Habló de un duelo de aciertos, donde los visitantes fueron más afectivos. Asimismo, afirmó que «Hoy teníamos más presión nosotros que ellos», pero también cree que «en Madrid será al revés». Dijo el brasileño: «Vamos a Madrid con todo para traer la eliminatoria de vuelta para acá y estoy convencido de que así será».

Por último, elogió a sus jugadores: «Este equipo tiene muy pocas ganas de irse de vacaciones y pasa por ganar el sábado, que será un ‘match ball’».