Gil quiere gobernar en solitario en Lorca, pero se compromete a llegar a «acuerdos»

Añadió Gil que baraja un ejecutivo en solitario abierto a las propuestas y a trabajar con otras formaciones políticas. Explicó que será un mandato «fuerte y sólido porque así lo han querido los lorquinos» y matizó que «habrá que llegar a acuerdos importantes en materias importantes» y que ahí será «totalmente receptivo». Según el alcalde electo, haber obtenido 11 de los 25 concejales que componen la corporación, «me permite ser 100% autónomo» para formar gobierno. Explicó que en los ayuntamientos gobierna la lista más votada «salvo que alguien consiga amalgamar una mayoría absoluta», que no ve posible en este caso, por lo que descartó un ejecutivo en coalición con Vox, que ha obtenido cuatro ediles, para unificar el bloque de la derecha.

Pacto con los lorquinos

Recordó que durante la campaña electoral «he dicho en todo momento que mi pacto era con los lorquinos» y manifestó que ahora tiene prisa por empezar a trabajar y poner en marcha su programa electoral. Anunció que cumplirá «a rajatabla» la premisa en su nueva etapa como alcalde de «estar abierto y en permanente contacto con los vecinos».

Gil reconoció que desde el inicio del escrutinio la noche electoral observó que «había un cambio claro con respecto a las tendencias de 2019, cuando ganamos por la mínima y en un contexto muy complicado», y que su partido iba a subir el número de votos. Consideró, además, que «España necesitaba un cambio y este empieza por los municipios y las comunidades autónomas».

Gil compareció ante los medios de comunicación sin haber dormido apenas por el «estado de agitación» tras la larga noche electoral. Dijo que lo primero que hizo por la mañana fue visitar a su padre y que en su teléfono móvil había más de 400 mensajes sin leer y decenas de llamadas sin contestar. Entre las que sí había atendido se encuentran las de los candidatos del PSOE, Vox e IU-Podemos, Diego José Mateos, Carmen Menduiña y Pedro Sosa, que le llamaron para darle la enhorabuena.

En barrios y pedanías

El triunfo de Gil se extiende por la mayoría de colegios electorales del centro de la ciudad, por lo que mantiene con holgura su feudo, pero también por barrios y pedanías, donde ha obtenido grandes resultados y el PP es la fuerza más votada como en Purias, La Hoya, Marchena, Campillo, Zarcilla de Ramos, Almendricos, La Escucha, Cazalla, La Parroquia, Torrecilla, Río, Morata, Aguaderas y Coy. En el barrio de San Antonio también superó al PSOE en votos y en Apolonia se situó por delante de Vox. Los populares estuvieron a pocos votos de superar al PSOE en el barrio de La Viña.

Tras conocer la convocatoria de elecciones generales del 23 de julio, anunciada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el alcalde electo dijo haberse sentido «impactado porque salimos de una campaña y ya me veo inmerso en otra». Señaló que en Lorca el PP «va a seguir trabajando para otorgarle a Alberto Núñez Feijóo la mayoría que necesita el partido y sobre todo España».