Polémica por el hormigonado del acceso al Salto del Usero en Bullas

La polémica surgió a principios de esta semana, cuando un grupo de vecinos alertaron al Consistorio de que se estaban llevando a cabo unos trabajos para cimentar el camino que da acceso a la poza principal del río. Así, criticaron al equipo de gobierno por llevar a cabo estos trabajos. Sin embargo, el Consistorio confirmó que las tareas corresponden a la Dirección General de Medio Natural. «No existe responsabilidad del Ayuntamiento de Bullas en esta actuación, ya que se diseña y se ejecuta a través de un proyecto al que este Consistorio no ha tenido acceso», explicaron desde la alcaldía.

Por ello, el Ayuntamiento exigió a la Comunidad «la paralización inmediata de estas obras y la retirada del material ya cimentado del entorno». Añadió que, «después de haber mantenido distintas conversaciones con la Dirección General, esta institución se ha mostrado comprensiva con nuestras peticiones. Además, insisten en que con estos trabajos no se está agrediendo ambientalmente al Salto del Usero, sino que los trabajos en esta senda, de 150 metros de largo por 1,5 de ancho, se encontraban en su fase inicial y su terminación suponía una capa más de piedra vista y unos rollizos de madera laterales para convertirlo en un camino totalmente integrado en el paisaje de ribera».

Sin embargo, esta explicación no convenció al equipo de gobierno, que insistió este lunes en solicitar la paralización de los trabajos que hasta el momento se habían acometido en el paraje. Desde el gobierno municipal aclararon que, «en nuestra línea de conservación de los parajes naturales del municipio, y más en este emblemático lugar, no entran este tipo de actuaciones, y más aún teniendo en cuenta que el Salto del Usero fue declarado recientemente Monumento Natural de la Región de Murcia. Por lo tanto, les hemos exigido la restitución del entorno de forma urgente».

«Los trabajos continúan»

A preguntas de este diario, la Comunidad explicó que la Dirección General presentó un proyecto para mejorar el entorno, con la reordenación de caminos, la renaturalización de sendas y la eliminación de especies invasoras, entre otras iniciativas. «El Consistorio nos propuso crear una senda peatonal circular, pero entendimos que tenía un impacto ambiental negativo, así que lo descartamos porque había peligro de desprendimientos», señaló la directora general de Medio Natural, Mari Cruz Ferreira.

Añadió que «hablamos con la alcaldesa y le dimos la opción de adecuar una senda distinta a la que ellos proponían, y aceptaron. La actuación requería crear un camino de piedra y barandillas de madera, sin impacto ambiental. Esa obra incluye, como ocurre en todos los lugares donde se hace, echar una capa de hormigón para que la gente no se resbale, y es lo que estamos haciendo». Por ello, Ferreira se mostró sorprendida ante las afirmaciones del equipo de gobierno. «Han mentido. Aceptaron nuestra propuesta, por lo que no vamos a paralizar nada».