El PP dice que Vox solo quería presidir la Cámara y que rechazó otras opciones para entrar en la Mesa

En cualquier caso, el enfado que llevaba al finalizar el Pleno el presidente de Vox en la Región, José Ángel Antelo, era monumental. «Génova ha decidido que en la Región de Murcia se repitan las elecciones autonómicas», declaró en la rueda de prensa posterior a la sesión. «El PP nos ha vetado y estamos perplejos», dijo el líder de la formación de Santiago Abascal en la Región.

Con la amenaza de la repetición electoral, Antelo advierte así a López Miras de que, si no se sienta a negociar con ellos, Vox votará en contra de su futura investidura, abocando esta al fracaso, ya que para que salga adelante el PP necesita el voto favorable de los 9 diputados de Vox en primera votación o la abstención de estos en la segunda votación. El Estatuto de Autonomía establece que si, pasados dos meses de la primera investidura fallida, el candidato sigue sin obtener la confianza de la Cámara, se disolvería la Asamblea y se convocarían nuevas elecciones autonómicas.

Además, Antelo indicó que, ahora que el Parlamento autonómico está en marcha, no descarta presentar una reforma de la ley del presidente para recuperar la limitación de mandatos establecida en tiempos de Alberto Garre al frente de la Comunidad, algo que impediría a Miras ser reelegido por tercera vez. Esta tendría que ser apoyada por PSOE y Podemos. Vélez afirmó que estaría dispuestos a estudiarlo.

No obstante, el dirigente de Vox afirma que sigue «con la mano tendida esperando a que alguien nos la coja», con el objetivo de alcanzar para la Región y en los ayuntamientos un acuerdo similar al de la Comunidad Valenciana. En cualquier caso, Antelo se mostró pesimista, «pues en los municipios nos estamos encontrando 45 partidos populares distintos, 46 si contamos el de la Asamblea Regional».

«El PP quiere que le regalemos los votos y eso es imposible. No nos ofrecen nada y nos piden todo», insistió Antelo, quien desveló que los populares le propusieron «firmar un papelito» para que Vox apoyara siempre sus propuestas en la Junta de Portavoces, órgano clave para ordenar la actividad parlamentaria cada semana, donde los populares no pueden librarse de Vox.

«Podemos gobernar solos»

El vicesecretario de Organización del PP de la Región, Joaquín Segado, insistió en que Vox no quería otra cosa que la presidencia de la Asamblea, que según él correspondía «al partido que logró el 43% de los votos». Segado, que confirmó su continuidad como portavoz del Grupo Parlamentario Popular, señaló que lo ocurrido con la Mesa es una prueba de que «no necesitamos el apoyo de nadie para gobernar, simplemente necesitamos que no se nos bloquee».

En ese sentido, aseguró que tiene «la mano tendida» a Vox «para hablar de proyectos de futuro para la Región». En cambio, el PP mantiene su intención de formar un gobierno en solitario.

El presidente nacional de Vox, Santiago Abascal, tachó de «profundo error» que el PP deje fuera a su partido de la Mesa de la Asamblea Regional, lo cual achacó a «cálculos de política estatal» del líder de los populares, Alberto Núñez Feijóo.

Así lo indicó Abascal en una entrevista en Servimedia, donde interpretó que lo sucedido en la Región de Murcia responde al «intento de Génova 13» y de Feijóo de «dinamitar los siguientes acuerdos con Vox» en clave autonómica y local, y le advirtió de que pretender que su partido «mire para otro lado» o que «entregue sus votos gratis al PP en Murcia es algo que está fuera de la realidad».

Según Abascal, «no es posible» pretender que Vox, que «representa a un 18% de los ciudadanos de la Región de Murcia» tras las elecciones del 28 de mayo, «actúe como si no existiese». «Quien plantea esto se equivoca profundamente», destacó, al tiempo que aseguró que le da «mucha pena» que se «prive» a los ciudadanos de la Comunidad de una «alternativa» como la de la Comunidad Valenciana y Castilla y León. Abascal afirmó no saber qué es lo que hará el PP en la Región a partir de ahora, pero sentenció que ha dado «un primer paso tremendamente negativo». Por ello, le avisó de que Vox «votará en contra» de la investidura de Fernando López Miras si los votantes de su partido «no son respetados», si «ese 18% de los votantes es enviado a la oposición» y no entran en el Gobierno regional.

Así, Abascal recordó a López Miras «que no tiene los escaños» para gobernar en solitario.