El concurso, una transición amarga hacia un futuro mejor

El concurso, una transición amarga hacia un futuro mejor

El Real Murcia no es el único club que ante problemas económicos desbordantes tuvo que recurrir al concurso de acreedores. Una gran cantidad de entidades, en algún momento determinado, se han visto en la necesidad de recurrir a este recurso para superar situaciones de tanta incertidumbre en el ámbito institucional que afectaban a su propia supervivencia. Así, los ejemplos son numerosos y variados.

El primer caso que se podría citar es el de Las Palmas, precisamente uno de los equipos que acaban de ascender a Primera División. Un presente feliz que antes tuvo que superar momentos muy complicados. Durante 10 años estuvo metido en un concurso de acreedores. Entró en 2004 por una deuda que con intereses, recargos y sanciones alcanzó los 72 millones de euros. Pudo salir en 2014. Incluso, en esos años tuvo que hacer frente a la Segunda B. El equipo, eso sí, pudo volver al fútbol profesional y de 2015 a 2018 compitió en la máxima categoría, a la que ahora regresa.

En 2014, el Deportivo también entró en concurso por una deuda de 160 millones

Por su parte, otro histórico del fútbol español como es el Sporting de Gijón se vio en ese mismo escenario en 2005 por culpa de una deuda que alcanzaba los 50,7 millones de euros. En esa situación se mantuvo hasta 2018, año en el que realizó los últimos pagos. En ese periodo, no obstante, fue capaz de ascender tres veces a Primera División, una de ellas especialmente remarcable con Abelardo en el banquillo y con grupo formado por gente de la casa.

El Celta de Vigo salió en enero de 2020 de un concurso suscrito en 2009. Un proceso de más de 10 años en el que se vio inmerso por una deuda de unos 87 millones. El equipo por entonces tuvo que jugar, además, en Segunda División. Fue un momento en el que, con Eusebio Sacristán de entrenador, el futuro del club también iba a pasar por la cantera. El club olívico regresó a Primera en 2012 y no ha vuelto a bajar. En este tiempo también llegó a unas semifinales de Europa League.

La Real, de Segunda a Europa

A esa competición se ha habituado la Real Sociedad, que la próxima temporada jugará la Champions League. Así, el club donostiarra vive una estado de salud formidable que hace algunas temporadas parecía difícil imaginar. Y es que entró en concurso en 2008 viéndose en riesgo de disolución. Así hasta 2013. Con Jokin Aperribay, actual presidente, ya al mando en esos momentos tan complicados, la Real Sociedad vive una plenitud y también con la seña de identidad de la cantera. Tampoco se libró un club como el Betis, en su caso por culpa de una deuda de 90 millones.

Un clásico que encadena muchas temporadas en Segunda es el Zaragoza. En su caso, entró y salió de ese proceso en apenas un año. En 2011 se vio en esa tesitura con una deuda de 145 millones. Ya en 2012 pudo abandonara. El Albacete lo sufrió en 2010 por más de 13 millones de deuda. Ahora está en Segunda y disputó el último ‘playoff’ a Primera tras verse varias temporadas en Segunda B.

Primera RFEF

Ya en la categoría en la que está actualmente el Real Murcia, la Primera Federación, aparecen otros clubes como ejemplos de esa realidad a la que se acogen tantos equipos. Como el Deportivo, un gigante dentro de la competición. Entró en concurso en 2014 y salió un año después. Era un momento en el que el club, aún bajo el mando de Lendoiro, alcanzó los 160 millones de deuda en una época con dos descensos a Segunda.

Otro equipo potente en la categoría es el Málaga. Participante en la Champions League, tampoco se libró de esta realidad y acabó con su concurso en 2018. Otra muestra es la del Recreativo. En su caso entró en 2010, poco después de bajar de Primera. Desde 2015 está lejos del fútbol profesional y su situación ha llegado a ser crítica. Incluso bajó a Tercera, aunque acaba de subir a Primera Federación tras dos ascensos seguidos. No son buenos tiempos para el Hércules, que también se ve afectado por los problemas económicos y, además, cumplirá su tercera campaña seguida en Segunda Federación.

Pero lo más llamativo en las últimas horas llegó desde Asturias. Y es que casi a la vez que los granas, el Oviedo también ponía fin a 20 años de concurso. Una deuda de 40 millones le metió en esa situación. El club se vio abocado a Tercera División y su futuro estuvo en entredicho. Desde este momento, ya podrá ingresar el 100% de los traspasos. Ambos, Real Murcia y Real Oviedo, rivales en la 14-15, ahora podrán respirar mucho mejor.

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