Mortadelo y Filemón se han quedado huérfanos. Su genial creador, el dibujante Francisco Ibáñez, falleció este sábado por la mañana en Barcelona a los 87 años. Con más de 50.000 páginas publicadas, se trata de la figura del tebeo más relevante de España. Los encargados de dar la triste noticia fueron los miembros de la editorial Penguin, que destacan el «enorme legado de su lucidez y sentidos del humor».
Ibáñez ha creado multitud de personajes, aunque todos ellos han quedado inevitablemente eclipsados por los descacharrantes Mortadelo y Filemón. Los agentes de la TIA han protagonizado miles y miles de viñetas del creador catalán. De hecho, desde la década de los noventa se dedicó casi en exclusiva a estos dos personajes, que han llegado incluso a dar el salto a la gran pantalla.
Pero no siempre trabajaron los detectives con el superintendente Vicente. Durante sus primeros años, protagonizaban historias cortas, más de ‘sketch’, donde eran protagonistas los disfraces de Mortadelo y los malentendidos con su jefe, que con sus dos pelos en la cabeza medía metro sesenta frente a los dos metros del investigador calvo.
Tampoco fue siempre calvo aquel a quien llamaban ‘Mortadelo el Melenudo’. Pero probó un ungüento de un científico que, en lugar de fortalecer y dar brillo, provocó una alopecia fulminante. El inventor era el Profesor Bacterio, otro personaje que Francisco Ibáñez introdujo en el primer gran álbum de Mortadelo y Filemón, ‘El sulfato atómico’, una aventura larga que supuso el salto al gran formato de los dos Técnicos de Investigación Aeroterráquea (TIA).
Personajes variopintos
Aparte de esta dupla de titanes, que en su historia hasta han participado en Juegos Olímpicos o en más de un Mundial de Fútbol, la inventiva de Ibáñez ha dejado a personajes de la talla del cegato Rompetechos o el travieso Botones Sacarino, sin olvidar la gran saga de 13 Rue del Percebe, que en lugar de las clásicas viñetas mostraba las viviendas de un edificio sin la pared que daba al lector del tebeo (y con un moroso en el ático que remitía al dibujante Vázquez).
En los nombres de sus series, Ibáñez solía emplear rimas como ‘Mortadelo y Filemón, agencia de información’, ‘La Familia Trapisonda, un grupito que es la monda’ o ‘Pepe Gotera y Otilio, chapuzas a domicilio’, con el albañil más parecido a Gargantúa. Pero otra característica de sus historietas eran los comentarios de personajes secundarios o puntuales, a veces incluso surrealistas. Y esas paredes o bordillos urbanos, en muchas ocasiones llenos de detalles o bichos.
Ibáñez nació en Barcelona cuatro meses antes de que estallara la guerra civil. Creció en una familia de clase media baja y desde muy pequeño desarrolló una gran afición por los tebeos y las películas de comedia americana.
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Enlace de origen : Muere Francisco Ibáñez, el padre de Mortadelo y Filemón
