Carlos Alcaraz entra en un club restringido

Carlos Alcaraz entra en un club restringido

«Espero jugar la final de Wimbledon con Novak Djokovic», dijo el pasado 1 de julio Carlos Alcaraz, quien parecía que quería vengarse de lo que sucedió en las pasadas semifinales de Roland Garros. «Lo que ocurrió en París me va a servir de recordatorio para que no vuelva a pasar», añadió el murciano, refiriéndose a los calambres que le atenazaron en el tercer set. El joven tenista de El Palmar (20 años), tras un inicio de nivel bajo fue poco a poco elevando el nivel hasta acabar pasando por encima del serbio (36 años), como en su día consiguió Conchita Martínez, cuando con 22 años paró en seco a Navratilova (38 años), el día que la checa luchaba por su décimo entorchado en el All England Club. O también como hizo Garbiñe Muguruza (23 años) en 2017, cuando sacó de quicio a Venus Williams (37 años), a la que superó en el choque decisivo (7-5 y 6-0). Manolo Santana y Rafa Nadal, este en dos ocasiones son los otros dos tenistas españoles que han subido a lo más alto en el torneo londinense. Santa fue el primera y Nadal el único que, de momento, lo ha ganado más de una vez. Ha jugado cinco finales y ganó en 2008 y 2010.

En la pista central del All England Club, además del título de campeón de Wimbledon 2023, también estaba en juego el número uno mundial. Lo conserva el pupilo de Juan Carlos Ferrero. Esta temporada ha alternado el trono con Novak Djokovic. El último cambio al frente de la ATP se produjo justo antes de Wimbledon, cuando el murciano recobró el puesto perdido en Roland Garros cuando se proclamó campeón en la hierba del torneo ATP 500 de Queen’s.

Con su triunfo de ayer, Alcaraz continuará al frente de la clasificación ATP, por 29ª vez en su cuenta global, con una ventaja de 880 puntos, que deberá defender durante todo el verano, incluyendo los 2.000 del US Open, en el que Djokovic solo aumentará sus números, ya que se perdió la gira norteamericana del año pasado al tener prohibida la entrada por no haberse vacunado.

1966 Manolo Santana

Manolo Santana


Santana levanta el trofeo decampeón de Wimbledon.


EFE


Manolo Santana convirtió el tenis en un deporte muy popular en España en una época, principios de los años 60 del siglo XX, en que era algo casi elitista. En 1966 se convirtió en el primer tenista español que se proclamó vencedor del torneo de Wimbledon. Derrotó en la final al norteamericano Dennis Ralston y el madrileño puso fin a doce años de sequía europea en la hierba de Londres.

Para alcanzar esta cima, inédita para un español, renunció a participar ese año en Roland Garros y estuvo un mes aprendiendo a jugar como lo hacían los australianos: jugadores altos y fuertes, no como el madrileño, que basaban su juego en el saque-volea. Dennis Ralston, «un americano muy grandote», según dijo entonces Santana, quien añadió que el americano no se tomó nada bien la derrota: «No entendía que un español le ganara en hierba». Y es que Ralston pecó de soberbio, ya que estaba convencido de su superioridad, reforzada en el torneo de Queen’s, previo al Grand Slam británico, en el que había ganado al español. Pero las tornas cambiaron en la central del All England Club el 2 de julio de 1966 y el español ganó por 6-4, 11-9 y 6-4. Cuando recogió la copa lo hizo con el escudo del Real Madrid en el pecho y, saltándose el protocolo, besó la mano de la duquesa de Kent.

1994 Conchita Martínez

Conchita hizo historia ante Navratilova


Conchita Martínez, con la bandeja de campeona.


Wimbledon


El 2 de julio de 1994 fue día gran en la localidad aragonesa de Monzón (Huesca). Ese día, Conchita Martínez se convirtió en la primera española en ganar Wimbledon, marcando un hito en el tenis femenino español. La aragonesa ganó a la estadounidense y veterana Navratilova (6-4, 3-6 y 6-3), que luchaba por su décimo entorchado en el All England Club. La tenista española ha recordado en más de una ocasión la bola de partido con la que ganó a Navratilova. «La golpeé sin miedo, ni vértigo, aunque sí «con un poquito de escalofrío». Ganar en Wimbledon, y ser la primera española en lograrlo fue, añadió Conchita, «algo grandioso». En el primer set Conchita perdió dos veces su saque y lo recuperó tres. En el segundo Martina se puso 4-0. La española tuvo tres bolas para igualar 4-4 pero Martina salvó la situación. Después, Conchita pidió asistencia médica. En el tercer set Conchita empezó 2-0. Martina recuperó pero la española llevó de nuevo el marcador al 4-2 y ya no se dejó arrebatar la ventaja. Emocionada, se apoyó sobre el hombro de una Martina que recogió una brizna de césped de la Pista Central y le dijo que pese a todo, lo sentía por ella. En Monzón, el triunfo de su paisana, hace 29 años, se celebró con una gran fiesta.

2008 y 2010 Rafa Nadal

A la tercera fue la vencida para Nadal


Rafa Nadal muerde el trofeo que ganó en 2010.


Reuters


A la tercera fue la vencida y, tras dos finales perdidas, el balear Rafael Nadal venció en 2008 en la final de Wimbledon a Roger Federer, campeón de las cinco ediciones anteriores, tras un partido épico, con dos interrupciones a causa de la lluvia y que necesitó de cinco sets y casi cinco horas de juego para acabar cayendo del lado del mallorquín por 6-4, 6-4, 6-7, 6-7 y 9-7. Nadal demostró como su juego crece día a día y ya no sólo es capaz de derrotar a Federer sobre tierra batida, sino también sobre hierba, la superficie favorita del suizo.

Fue el primero de los dos triunfos de Nadal en el Grand Slam londinense. La final contra Federer es muy recordada por su espectacularidad. Mantuvo a miles de aficionados pendientes del televisor durante casi siete horas, en una final que acabó pasadas las 22 horas, cuando la luz en Londres empezaba a escasear y todo apuntaba a un aplazamiento.

Tomas Berdych (República Checa) fue su rival en la final de 2010. El checo no puso las cosas tan difíciles. Ganó Nadal 6-3, 7-5 y 6-4. El partido se resolvió en que resolvió en 2 horas y 13 minutos.

Rafa Nadal llegó a otras tres finales en Wimbledon, que perdió. En 2006 y 2007 cayó ante Federer, y en 2011 lo hizo ante Djokovic.

2017 Garbiñe Muguruza

Garbiñe desquició a Venus Williams


Muguruza alza la bandeja de Venus de campeona.


Wimbledon


Garbiñe Muguruza acabó arrollando a Venus Williams en la final de 2017, 23 años después del triunfo de Conchita, su entrenadora entonces. La española tuvo que salvar dos bolas de set en la manga inicial para ganar 7-5 y 6-0 en 1 horas y 17 minutos.

Tuvo 4-5 y 15-40 en contra Garbiñe en el primer set. Remontó las dos bolas que le hacían perder la manga con una gran autoridad. A partir de este momento Garbiñe se vino arriba, mientras a Venus le ocurrió lo contrario. Simplemente, Muguruza era mejor en todos los sentidos. Encadenó nueve juegos consecutivos para ser la nueva reina de Wimbledon. No dejó respirar a la norteamericana con un festival completo de tenis: conocidas eran sus cualidades como ‘pegadora’, pero defendió a lo Nadal y restó con una eficacia que frenó a Venus.

El final fue de infarto porque Garbiñe, con tres bolas de partido, reclamó el ojo de halcón dos veces. Falló en la primera, que se tuvo que repetir, pero acertó en la segunda. Su triunfo estaba sellado y ella, como predijo, colocó un nombre español, por fin, en el territorio de las Williams. Serena, embarazada, no jugó ese año. «Lo mejor de ganar Wimbledon es entrar en la historia», dijo Garbiñe tras su triunfo en Londres.

Enlace de origen : Carlos Alcaraz entra en un club restringido