La Guardia Civil salva la vida de un vecino de Cieza gracias a la casualidad

La Guardia Civil salva la vida de un vecino de Cieza gracias a la casualidad

El profesor ciezano José García Férez no va a olvidar nunca a Fran, Carlos y Salva, los tres agentes de la Guardia Civil que hace unos días lo socorrieron y prácticamente le salvaron la vida tras el accidente que sufrió en su propia casa. Fue a primera hora de la mañana del sábado 8 de julio, cuando José se disponía a realizar una mudanza desde su domicilio. En el momento en el que comenzó a descender por las escaleras resbaló y se precipitó, para después, literalmente, salir disparado hacia la calle, quedando malherido.

Tras el accidente, comenzó a sangrar abundantemente por la cabeza ya casi inconsciente. Fue en ese momento cuando, de manera totalmente imprevista, pasó por el lugar un coche patrulla con estos tres agentes que, sin pensárselo dos veces, se lanzaron a auxiliar a la víctima. El agente Fran, tras arroparlo en su regazo y con la ayuda de sus dos compañeros, supo «con su voz segura y excelente técnica de salvamento, socorrer mi herida y mantenerme asido a sus brazos hasta la llegada de los médicos y enfermeros del 112», tal como explicó a LA VERDAD el profesor de filosofía del IES Diego Tortosa de Cieza.

Después, tras la llegada de una ambulancia, fue trasladado al Hospital de Cieza donde fue socorrido por traumatismos múltiples, policontusiones craneales y faciales y hundimiento del tabique nasal. Las dos grandes brechas que se hizo en la cabeza precisaron de 37 grapas de fijación y 13 puntos de sutura. También tuvieron que realizarle una intervención en la nariz.

Para José García, la acción «rápida y tenaz del agente Fran, que contuvo con sus manos la hemorragia, impidió que perdiera la vida». Afirma que no sabe si fue «la suerte, la providencia o el destino», o tal vez las tres cosas, las que hicieron que en ese mismo momento «pasara por el portal de mi edificio un coche patrulla de la Guardia Civil».

Aún en recuperación, José García Férez extiende su agradecimiento a los médicos del servicio de Urgencias del Hospital de la Vega Lorenzo Guirao de Cieza y a su familia, en especial a su esposa, Mara Torres.

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