Situación tensa en el buque Río Tajo. La embarcación de la Guardia Civil lleva desde el jueves fondeado con 168 migrantes a bordo en la bahía de Nouadhibou, en Mauritania. El buque se encuentra ahora mismo a la espera de que avancen las negociaciones entre las autoridades de ambos países para proceder al desembarco de migrantes en el país africano, según informan fuentes del Ministerio del Interior.
Los hechos que han desencadenado esta inusual situación tuvieron lugar cuando la patrullera española interceptó un cayuco con 168 personas y los agentes no pudieron llevarlos al puerto de Nuadibú, capital comercial del país africano. Las autoridades mauritanas no autorizaron a la Río Tajo -una de las más grandes del Instituto Armado- a atracar, pero tampoco lo hicieron a desembarcar a los rescatados, que habían salido presumiblemente de Senegal y que fueron interceptados cuando ya estaban a más de 80 millas náuticas (148 kilómetros) de las costas mauritanas.
La tensión fue creciendo ante la imposibilidad de atracar en el puerto, llegando incluso los agentes a disparar al aire para controlar la situación e impedir que se produjese un posible motín. De hecho, el mismo sábado se decidió reforzar el número de agentes en el buque, movilizando a efectivos destinados en el destacamento de Nouadhibou. Agentes y migrantes ocupan ahora mismo compartimentos distintos en el buque del Instituto Armado. No obstante, desde el ministerio que dirige Fernando Grande-Marlaska insisten en que la situación es de «tranquilidad» y en que confían en que la situación se resuelva de forma «inminente».
Fuentes de Interior destacan, además, que las personas rescatadas han recibido atención médica por parte de la tripulación y que esta misma mañana la Guardia Civil ha habilitado un sistema para que, por turnos, los rescatados pudiesen contactar con sus familiares.
«Condiciones penosas»
Aunque algunas informaciones señalaron que la patrullera pondría rumbo a Canarias, con agentes y migrantes a bordo, el Ministerio del Interior lo niega de forma tajante. Y desde la AUGC, la asociación profesional de la Guardia Civil, denuncian las «condiciones penosas» en las que están los agentes y los migrantes. Unas condiciones que achacan a la falta de cooperación de Mauritania. «La seguridad a bordo y la falta de higiene puede agravar la situación», sostienen desde el sindicato -además de recalcar que el transcurso del tiempo puede provocar que se vuelva a producir algún episodio de tensión-.
#ÚLTIMAHORA| Máxima atención y apoyo en estos momentos desde AUGC a nuestros compañeros que se encuentran fondeados con la Patrullera Río Tajo en bahía de Nouadhibou con 170 inmigrantes rescatados en cayuco.
Autoridades de Mauritania no permiten el desembarco de rescatados. pic.twitter.com/vKtEw3CcyQ
— AUGC Guardia Civil 🇪🇸 (@AUGC_Comunica) August 26, 2023
En su cuenta oficial de X, antes Twitter, la AUGC ha asegurado que las negociaciones entre la agencia europea Frontex y las autoridades mauritanas están siendo «infructuosas». Algo que no deja de resultar sorpresivo ya que España mantiene desde hace una década un convenio con Mauritania que permite la devolución en sus puertos de cualquier migrante, sea cual sea su nacionalidad, siempre y cuando haya salido de sus costas o transitado por su territorio.
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Enlace de origen : La Guardia Civil continúa atrapada en Mauritania con 170 inmigrantes a bordo
