El pasado vuelve con todo su esplendor

El pasado vuelve con todo su esplendor

Con cuatro décadas a sus espaldas y con la mirada, y el objetivo, fijado en lograr dar el salto y ser declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional, los Moros y Cristianos de Murcia vivieron este sábado su día grande después de haber estado preparando para lo que se avecinaba a vecinos y turistas durante toda la semana. Pasacalles, actividades variadas en el Campamento Medieval, que vuelve a ocupar el aparcamiento disuasorio del Malecón, la bienvenida del Consistorio y, como aperitivo, el primer desfile infantil por el corazón de la ciudad.

Kábilas y mesnadas, detrás de las que ya hay casi un millar de festeros, volvieron a darlo «todo» para dejar el mejor sabor de boca posible a quienes vienen llenando los espacios que marcan el recorrido, desde la alameda de Colón en el barrio del Carmen, pasando por el Puente Viejo, hasta llegar a la avenida de la Constitución, una vez atravesada la Gran Vía de punta a punta. Luces, marchas moras y cristianas tocadas en vivo; bailes propios y de academias que participan en el cortejo; espectáculos de caballos, lucha y aves rapaces en vuelo; trajes y vestidos diseñados y elaborados con esmero, lujo y colorido… Todo para conmemorar la historia de la Mursiya medieval, en la que moros y cristianos han dejado su impronta en la identidad de quienes siglos después pueblan la ciudad.

Ponen todo su mejor hacer los grupos moros Almohades, Ibn Amnar ‘Abenamar’, Abú-L-Abbás, Almorávides, Mudéjares, Ibn Arabí, Abderramán II y Abenmardenix. Y los cristianos: Santa María de la Arrixaca, San Juan de Jerusalén, Infante Don Juan Manuel, Orden de Santiago, Jaime I, Templarios de Murcia y Huestes de Fernando III.

La junta directiva de la Federación de Asociaciones de Moros y Cristianos ‘Civitas Murcie’ ha querido homenajear en este cuarenta aniversario a todos los que han trabajado por estas fiestas y por que lleguen hasta donde están hoy: ya nadie las percibe como un encuentro privado, como se decía en sus comienzos. Y lo hizo con la participación en el gran desfile de ayer de todas las abanderadas que siguen aún en activo con una carroza propia.

Las hermanas Marta y Natalia Serrano Roses forman parte de esas abanderadas históricas que este año se subieron a las carrozas preparadas para celebrar el cuarenta aniversario de la fiesta. Son el segundo ejemplo de hermanas que han representado al mismo grupo, en su caso a la kábila Abu-L-Abbas. Natalia en 2012 y Marta en 2016. «Lo que más ilusión nos hace es poder vivirlo juntas, compartir la emoción que sentimos», coincidieron ambas, como también al señalar que, sin duda, el momento «más mágico» del desfile es cuando pasan por el Puente Viejo o de los Peligros.

El público presente durante todo el recorrido calificó el desfile como el mejor de los últimos años y destacaron el espectáculo de los caballos y los bailes. La anécdota de la noche fue la pedida de mano frente a la tribuna de las autoridades de Carmen María García Paredes e Ismael Fuentes Rubio, una dama y un caballero de San Juan de Jerusalén.

Enlace de origen : El pasado vuelve con todo su esplendor