Las consecuencias de la guerra entre Hamás e Israel para nuestros bolsillos: gasolina, gas e hipotecas

Las consecuencias de la guerra entre Hamás e Israel para nuestros bolsillos: gasolina, gas e hipotecas

La ofensiva de Hamás contra Israel no solo tiene consecuencias en Oriente Próximo, también en el resto del mundo y en nuestros casas. Entre otras cosas por la subida del precio del petróleo, pese a que ni judíos ni libanes sean productores importantes de esta materia premia. Ayer, los analistas económicos se afanaban por calcular cómo va a afectar esta guerra a nuestros bolsillos, tocados ya por la que se libra en Ucrania. Para empezar, los precios del barril de Brent subieron más de un 4%, hasta alcanzar los 88,15% en el caso del mar del Norte y los 86,38 en el de West Texas Intermediate.

Y esto sucede en un contexto que se tornaba favorable: después de los últimos meses de tendencia inflacionista, su importe empezaba a bajar demasiado rápido para algunos expertos, como Eli Rubin, de EBW Analytics Group. Los inversores, además, están preocupados porque el ataque puede afectar directamente a países que sí son importantes productores de crudo, como Irán y Arabia Saudí, que incluso podrían implicarse directamente en el conflicto.

De momento, Irán es el segundo país en el ranking de países exportadores de petróleo y eso pese a las sanciones de la que es objeto por su alianza con Hamás. Lleva años alimentando a la organización, tanto ideológica como económicamente, y se le ha señalado como socio ‘sine qua non’ se hubiera preparado el ataque sorpresivo de este sábado.

El gas y los tipos de interés

Otro de los mercados sacudidos por el conflicto es el del gas. Uno de los yacimientos israelíes más importantes, el de Tamar, se ha visto obligado a cerrar. Ello ha tenido como consecuencia que el precio de este elemento se haya disparado un 12%, hasta los 42 euros por megavatio hora. Mientras la industria se prepara para suplirlo por otros combustibles alternativos, se calcula que el golpe será fuerte en las próximas semanas.

Todo ello ha tenido repercusión directa en las bolsas internacionales, que han sufridos caídas, de momento moderadas. Este lunes, bajaban su cotización las empresas turísticas y subían las petrolíferas, energéticas y armamentísticas. En Israel, cayeron un 6%. Otro de los efectos que se estudia ahora es qué pasará con los tipos de interés, que se habían estabilizado a la baja y que podrían volver a subir de nuevo, lo que repercutiría directamente en las hipotecas.

Enlace de origen : Las consecuencias de la guerra entre Hamás e Israel para nuestros bolsillos: gasolina, gas e hipotecas