El centenario caudal de Vocento enriquece la Caja de las Letras del Cervantes

Los directores de los doce periódicos del Vocento, ocho de ellos con más de un siglo de antigüedad, aportaron sus emotivos legados con ediciones, documentos y fotos históricas, facsímiles, exclusivas y manuscritos y viñetas cruciales para la historia del periodismo español. Fue en un acto presidido por el director del Cervantes, Luis García Montero, y el presidente de Vocento, Ignacio Ybarra.

Ybarra aseguró que Vocento y sus periódicos «legan una pequeña parte de su brillante pasado para perpetuarse en el futuro». «Un gesto –dijo– que prácticamente hacemos cada jornada en los periódicos: ser testigos de la realidad, contarla y depositarla en nuestro soporte papel y digital».

«Atesoramos un gran patrimonio cultural y hemos sido claves en el impulso del periodismo de este país. Por eso nos sentimos muy honrados de inaugurar esta nueva etapa del Instituto Cervantes que reconoce la importancia de los medios informativos en la construcción de la cultura y su papel en la defensa de los valores democráticos y de la libertad de expresión», afirmó Ybarra. Destacó cómo algunos de los diarios han conocido tres siglos diferentes y otros acaban de nacer. «Son periódicos de gran prestigio que no viven del pasado, sino que se ganan día a día la confianza de sus lectores con la aspiración de construir un mundo mejor», dijo. «Vocento es el grupo de comunicación con más presencia en el territorio español y este ejercicio de mirar al pasado a través de décadas de nuestra existencia ha servido para que nos esforcemos aún más».

El Cervantes reconocía a través de su director «la importancia de los medios informativos en la construcción y reflejo de la cultura de un país» y «su papel en la defensa de los valores democráticos y el ejercicio de la libertad de expresión e información». «El periodismo y la literatura van de la mano y no se puede hacer historia de la literatura sin él», dijo Luis García Montero. «Vivimos en momentos en los que es fundamental la reivindicación de la democracia y uno de sus ejes fundamentales es la información para configurar un espacio de debate en la opinión pública», agregó.

«Es muy importante reivindicar el periodismo como parte fundamental de la democracia y la cultura, de las tradiciones intelectuales de un país y por eso debe tener un lugar muy importante en nuestra Caja de las Letras la defensa de la información veraz y el deseo de formar un espacio público donde los debates se atengan a la realidad y a la diversidad. Y Vocento es un horizonte que ayuda a meditar sobre la importancia de la información local y del sentido de pertenencia», dijo antes de que los directores de los doce diarios impresos de Vocento junto al de de Relevo depositaran sus legados por orden de antigüedad en la caja número 1.263.

Los legados

Alberto Aguirre de Cárcer, al frente de LA VERDAD (1903), recordó al escritor y periodista José Ballester, que en 1923, con Juan Guerrero Ruiz como facilitador y el apoyo de Juan Ramón Jiménez, «tuvo el acierto histórico de crear en el periódico un suplemento literario que se convirtió en el rompeolas de las vanguardias poéticas y el hogar de las palabras para la Generación del 27». Acogió las voces de Juan Ramón Jiménez, Lorca, Alberti, Machado o Gabriela Mistral y un sinfín de escritores. LA VERDAD depositó en la Caja de las Letras 15 ejemplares ilustrados del semanario de artes, letras y ciencias Ababol que han homenajeado a los autores del Suplemento Literario (1923-1926), ilustrados por artistas de hoy, así como la obra original de Pepe Lucas que ilustró la portada de la serie. Aguirre de Cárcer entregó, además, la revista del 120 aniversario de LA VERDAD, «que constituye todo un alegato en favor del periodismo desde la convicción de que el periodismo es ahora más necesario que nunca».

El director de El Norte de Castilla (1854), Ángel Ortiz, evocó a Miguel Delibes y José Jiménez Lozano, legendarios directores y ganadores del Premio Cervantes. «Comprenderán que sea el director de periódico más humilde de España», dijo antes de depositar dos caricaturas de Miguel Delibes publicadas en 1942, cuando tenía 22 años, firmadas como Max. «Delibes dijo que jamás hubiera sido periodista si no hubiera empezado a colaborar en el Norte de Castilla. Entró a trabajar en el decano de la prensa nacional como ‘caricaturista de buena voluntad’. Fue el comienzo de todo», concluyó Ortiz. Añadió ilustraciones sobre el partido Real Valladolid-Arenas.

Jesús Trelis, al frente de Las Provincias (1866), se remontó a la primera noticia del primer número, el 31 de enero de 1866, sobre «la afrancesada sublevación del general Prim» y al manifiesto fundamental del periódico «que casi ciento sesenta años después tiene vigencia absoluta en el mundo periodístico actual». «Venimos a ser lo que nuestras fuerzas permiten. La voz del país que quiere ser justa, prudente y económicamente gobernado. Nuestro lema es menos política y más protección a todos los verdaderos ilegítimos intereses sociales», contó.

Aportó una edición facsímil del manifiesto fundacional y otra del primer número del periódico y junto a una reproducción del especial gráfico que se hizo el día de después de la riada de 1957. «Fue el mayor ejemplo de resiliencia que le ha tocado narrar y padecer al periódico en su historia. El agua arrasó al periódico y a la ciudad, pero ambos, Las Provincias y Valencia, lo superamos y seguimos», dijo.

Para Ángel M. González, director adjunto de El Comercio (1878), el acto cobra mayor relevancia al coincidir con la celebración de sus 125 años de historia. Entregó un facsímil del primer número del diario publicado el 2 de septiembre de 1878 con el editorial con sus principios fundacionales. Su autoría corresponde al político Gumersindo de Azcárate. Incluyó un artículo de Francisco Carantoña, director del decano de la prensa asturiana durante 40 años. «Incluimos la última edición del diario bajo la dirección de Marcelino Gutiérrez, repentinamente fallecido a los 48 años el pasado 24 de septiembre y su último artículo, ‘A destiempo’, «que ejemplifica la agudeza y elegancia con la que Marcelino escrutaba la actualidad».

Teresa Cobo, directora de La Rioja (1889), aportó dos documentos fundamentales para su diario. El primero es una reproducción del «prospecto fundamental del periódico», del 14 de enero de 1889, y recoge una declaración de intenciones que firmaría sin ningún reparo y con orgullo cualquier lector y lectora de periódicos hoy. «Los cuatro directores que seguimos vivos hemos firmado ese documento incorporando una frase manuscrita: ‘La Rioja se esfuerza cada día, 135 años, después en ejercer un periodismo independiente, crítico y constructivo, riguroso valiente y honrado siempre al lado de la calle para lectores’». Además, incluyó varios artículos escritos por Miguel de Unamuno y publicados durante la Segunda República.

Íñigo Noriega, director de El Diario Montañés (1902), centró su legado en los dos premios Cervantes cántabros, José Hierro y Gerardo Diego. «Es una reivindicación del papel de la cultura y del periodismo en la transmisión de la cultura y de las artes», dijo. De Gerardo Diego aportó una crítica de arte publicada en 1921 y de Pepe Hierro, un original impreso del ‘Anuario de 1998’, con una ilustración del poeta.

Para Julián Quirós, director de ABC (1903), es «una ocasión gozosa tener el privilegio de entrar en este sagrario de la cultura» y hacerlo «después de 120 años de ABC, que, más allá de ser un altavoz, ha sido un agente activo de la cultura española y el español durante más de un siglo». Aportó la única foto existente del atentado del día de la boda de Alfonso XIII, el primer chiste de Mingote y la primera portada de ABC, del 1 de enero de 1903 con su manifiesto fundacional. También la portada del 19 de octubre de 1955 con la máscara mortuoria de Ortega y Gasset que burló a la censura, que había prohibido que la cara de Ortega se publicara; la portada del 17 de marzo de 1984, con la exclusiva de los ‘Sonetos del Amor Oscuro’ de Lorca; la portada del primer número del ABC Cultural, del 8 de noviembre de 1991; el artículo de Azorín del 18 de febrero de 1913 que denomina a la Generación de 1898, y ‘Mi nombre es Camba’, legendario artículo de Julio Camba publicado en 1913.

José Miguel Santamaría Alday, director de El Correo (1910), homenajeó al idioma, «nuestra principal herramienta de trabajo». «Como artesanos responsables tenemos la obligación de utilizar esta herramienta con mimo y tratarla con el exquisito cuidado que merece», dijo, recordando cómo en sus 113 años de historia El Correo abrió a sus páginas a los autores más significativos de cada época, como Baroja, Unamuno, Delibes, García Márquez, Vargas Llosa, Umbral o Ramiro Pinilla.

Depositó un volumen con los trabajos de los 36 ganadores del premio Correo de Periodismo, firmados por Álvaro Pombo, Rosa Montero, Francisco Ayala, Julio Llamazares, Francisco Nieva, Lorenzo Silva o Adela Cortina, entre otros.

Eduardo Peralta, director de Ideal (1932), recordó el nacimiento del rotativo que quiso homenajear «a dos insignes literatos de la historia de Granada, Ángel Ganivet y Federico García Lorca, un precursor de la generación del 98 y un poeta universal». El primero moría en 1898 y Lorca nacía ese mismo año en Fuente Vaqueros. El diario les dedicó los suplementos especiales ‘Ganivet y la Generación del 98’ y ‘Cien años de Federico García Lorca’, «monográficos en sus centenarios que traemos a la Caja de las Letras».

Mar Domínguez, directora de Hoy (1933), quiso celebrar los 90 años del diario con sus lectores. Recordó el primer número aparecido el uno de enero de 1933 y depositó un facsímil de ese legendario ejemplar. «Nosotros no tenemos más amigo que la verdad ni conocemos más enemigo que el error», decía el texto fundacional.

David Taberna, director de Diario Vasco (1934), destacó cómo durante cincuenta años de 90 del diario «la situación del terrorismo de ETA copó muchas de nuestras páginas». Llevó al Cervantes «uno de los tres ejemplares más especiales de la historia del diario, el día que ETA anunció el fin de su actividad el 20 de octubre de 2011 y España y Euskadi cambiaron para siempre». «Quiero hacer un homenaje a todos los periodistas que bajo el miedo y las amenazas dedicaron su vida a explicar la barbarie», dijo con un recuerdo especial para Santiago Oleaga, asesinado por ETA en 2001. «Las páginas del día de después de ese 20 de octubre de 2011 son las páginas de la memoria y las seguiremos escribiendo los de siempre. los que no podemos fallar, los periodistas», se ufanó.

«Los periódicos tenemos una frágil salud de hierro que nos mantendrá mucho tiempo al frente pese a quien pese», dijo Manuel Castillo, director de Sur (1937). «Nos preguntamos cómo aportar algo tan intangible como la forma de ser del diario y pensamos en que quien lo encarnaba mejor que nadie era Manuel Alcántara, poeta y articulista» dijo, antes de mostrar el original del discurso que Alcántara mecanografió en su Olivetti con motivo del primer Premio Alcántara de Periodismo creado en 1998.

A los diarios impresos se sumó uno solo en línea, Relevo, creado en 2022. «Somos el hermano pequeño. Nacimos en plena revolución para innovar y llegar a las generaciones más jóvenes que se han alejado de los medios y queremos cerrar esa brecha», dijo su director, Óscar Campillo. Cada uno de los directores de los trece medios de Vocento recibió de manos de Luis García Montero la llave simbólica y el diploma acreditativo de la entrega.