El adiós de Nuria Espert al teatro

El adiós de Nuria Espert al teatro

Muchas razones hacen que sea casi necesario ir a ver ‘La isla del aire’, el espectáculo que protagoniza la tarde de hoy en el Teatro Romea. Una de las que aportan más peso es que se trata de la despedida de los escenarios de Nuria Espert, una de las grandes damas del teatro. La actriz de 87 años, en el papel de abuela de la historia, es capaz de atraer todas las miradas en un montaje que parece construido a su medida. Junto a Nuria Espert, el reparto se completa con otra de las actrices que son historia de este país, Vicky Peña, además de Teresa Vallicrosa, Claudia Benito y Candela Serrat.

‘La isla del aire’

  • Cuándo:
    Viernes, 20 de octubre, a las 20 horas.

  • Dónde:
    Teatro Romea de Murcia.

  • Entradas:
    20, 22 y 25 euros.

Otro de los motivos del alto nivel de esta obra es su dirección: el varias veces galardonado con prestigiosos premios teatrales Mario Gas se pone al frente de esta producción de Teatre Romea de Murcia basada en la novela original de Alejandro Palomas, publicada en 2005. El escritor, traductor y periodista catalán destaca por sus novelas sobre la incomunicación y las dificultades familiares y cuenta con premios como el Nadal de 2018.

La historia de esta obra nos lleva a Menorca, donde una familia de cinco mujeres de tres generaciones, guiadas por la vieja Mencía (interpretada por Espert), se adentran en un viaje en barca a la Isla del Aire. Todas ellas han sido maltratadas por los hombres y por la vida. Abandonadas y engañadas. Durante la función, las protagonistas irán contando secretos y Mencía las obligará a enfrentarse a la verdad en mitad de su travesía.

Vicky Peña forma parte del reparto de esta obra basada en la novela original de Alejandro Palomas

A sus dramas se une la reciente desaparición de Helena, una de las nietas de Mencía, que está muy presente en la mente de la familia. Ella es el sexto personaje que no aparece de manera presencial, pero esencial para comprender el desconsolado duelo que siente Lía (Vicky Peña). Su madre, Mencía, es la única capaz de hacerle afrontar la pérdida, la misma que da comienzo al juego de contar secretos y destapa la caja de Pandora, conocedora de que sus hijas y nietas ocultan cosas. Pero también ella tendrá que escuchar las duras palabras de sus hijas, que le recuerdan los errores que cometió.

Las penurias son visibles y sufridas, tanto que el público se podrá sentir identificado con algunas de ellas: «Que si la vida te ha herido, que si te ha hecho daño, que si los hombres esto, que si eran otros tiempos… Un drama mayúsculo». Las cinco protagonistas presentan en primera persona las heridas en sus almas, las más complejas de curar y las que no se quieren oír, con diálogos ácidos, a veces sarcásticos y jocosos, en una necesaria catarsis. Unas y otras afrontan el abandono, la soledad, la ira, la frustración. De todo ello, la que más sabe es la más anciana de todas, la abuela Mencía, que está al tanto de todo lo que les pasa a las mujeres de su familia.

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