El campamento para inmigrantes del Hospital Naval de Cartagena abrirá en una semana con 600 plazas

El cartagenero estará ubicado en una de las tres explanadas del que fuera hasta el año 2012 un recinto hospitalario. Allí montarán tiendas y contenedores modulares, donde estarán alojados los inmigrantes. Estas seiscientas plazas se sumarán a las cien que el Ministerio habilitó la semana pasada en hoteles y casas de acogida. También estarán gestionadas por la ONG Accem, que trabaja para mejorar la calidad de vida de las personas refugiadas y migrantes y de colectivos más vulnerables.

Lo previsto es que estas personas puedan permanecer en el centro de acogida de Cartagena aproximadamente un mes, el tiempo que tardan en tramitar sus peticiones de asilo humanitario y contactar con sus redes asistenciales y familiares, con las que completarán el proceso de integración en España o en otros países de la Unión Europea (UE).

Se trata de uno de los tres recintos que prevé poner en marcha en España, para atender la llegada a las costas de ‘sin papeles’, como ya publicó LA VERDAD el pasado viernes.

En Madrid y Alcalá de Henares

Los otros dos estarán en el cuartel General Arteaga, ubicado en el madrileño barrio de Carabanchel y también abrirá a finales de la próxima semana para acoger a 1.200 personas. Cruz Roja será en este caso la entidad encargada de atender a las personas que sean alojadas. El otro estará ubicado en el acuartelamiento Primo de Rivera, en Alcalá de Henares. Este se pondrá en marcha a lo largo de la tercera semana de noviembre y tendrá una capacidad máxima de 1.100 personas. Este dispositivo también será gestionado por Accem.

Estas instalaciones permitirán desplegar casi 3.000 nuevas plazas, de forma que «se liberarán gradualmente las abiertas en las últimas semanas y se centralizarán los espacios para realizar las derivaciones a recursos estables del sistema», explicó el ministro Escrivá en un comunicado.

El Pleno del Ayuntamiento de Cartagena aprobó la semana pasada una iniciativa de rechazo a la creación de otro centro de acogida de inmigrantes, un CETI. La ciudad ya tiene una instalación similar para recibir a quienes llegan en patera, un CATE, cuyas instalaciones serán trasladadas a otro lugar, ante la críticas de asociaciones y colectivos. La Federación de Asociaciones de Vecinos, la patronal COEC y la Cámara de Comercio también mostraron su total rechazo a estas instalaciones.

El ministro destacó «el buen funcionamiento del sistema, con una gran flexibilidad y capacidad de atención de personas» y señaló que actualmente tiene 43.000 plazas entre la red de protección internacional y de atención humanitaria, de las que solo unas 5.000 se han abierto en las últimas semanas para atender el incremento de llegadas a costas, especialmente a Canarias.

Para informar de las derivaciones y apertura de plazas en cada territorio, Escrivá ha convocado para hoy una videoconferencia informativa en la que participarán los alcaldes de las principales ciudades españolas, así como de las localidades en los que el Ministerio de Inclusión tiene instalaciones de mayores dimensiones, la presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias, María José García Pelayo, y los consejeros en materia migratoria de todas las comunidades autónomas. En ella estará la regidora de Cartagena, Noelia Arroyo. En un principio no fue invitada, pero a través de una carta, Arroyo exigió asistir al ser la alcaldesa de una de las ciudades elegidas por el ministerio.

El presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Cartagena, Tomás Sánchez, mostró ayer su «rechazo frontal» a la instalación de un campamento para inmigrantes en una de las explanadas del Hospital Naval, ya que no estará equipado «con lo que verdaderamente necesitan estas personas». Sánchez no está en contra de ayudar a los inmigrantes. «Nos oponemos a que los metan en cualquier sitio no habilitado para ello», dijo. Y añadió: «Vienen en unas condiciones deplorables y nosotros vamos y los metemos en tiendas de campaña».

El presidente vecinal propone llevar a los migrantes a otras zonas con mejores instalaciones, ya que las del Hospital Naval «no sirven». Su idea, aunque parezca descabellada, es que los lleven a «los pueblos de la España vaciada, para que allí puedan hacer su vida en unas condiciones mejores».

El responsable de la Asociación de Vecinos de Tentegorra, Pedro Ferrer, explicó que los vecinos de esta zona del municipio están «muy preocupados», porque «no sabemos el impacto que tendrán estas instalaciones en las inmediaciones del barrio». Confesó que «no todos los residentes lo ven con malos ojos», pero que «la mayoría lo ve con desconfianza».

Ni CATE ni CETI

El Grupo Municipal de VOX rechazó en un comunicado los centros para inmigrantes, tanto CATE como CETI, en Cartagena, en Murcia y cualquier punto de España. Y denunció que parte de los contingentes policiales se destina a controlar a los inmigrantes, abandonando la vigilancia de la costa.

El malestar vecinal se hizo anteayer domingo patente en una protesta que reunió a unos quinientos vecinos. Fue ante el hospital y la concentración estaba convocada por la Asociación Cartagena Futuro. La presidenta, Cristina Martínez, explicó que la ciudad «no puede asumir un problema nacional por sí sola y propuso que estas instalaciones estén ubicada en la capital murciana.