Los trabajadores de Renfe suspenden la huelga que iba a cancelar 1.500 trenes este viernes

En juego estaba la circulación de 1.500 trenes de media y larga distancia -incluidos trenes AVE- que no habían sido incluidos en el plan de servicios mínimos fijados por el Ministerio de Transportes, del 72% en el caso de los trenes de larga distancia, del 65% para la media distancia y del 50% en los Cercanías en horas que no sean punta.

El Ministerio encabezado desde hace solo unos días por Óscar Puente se ha implicado en las negociaciones con los sindicatos para evitar una huelga que iba a afectar a decenas de miles de personas. Desde el gabinete confirman que se va a retomar la programación de la jornada, aunque admiten que podría haber alguna incidencia a primera hora que se irá subsanando.

Los sindicatos aseguran que han conseguido todas sus reivindicaciones, ya que se les ha prometido la «garantía de integridad» de las empresas públicas Renfe y Adif pese al traspaso de Rodalies y el mantenimiento de las plantillas.

Los servicios mínimos establecidos dejaban fuera a casi el 30% de los AVE y larga distancia (451 trenes de los 1.185 que tenían previsto circular este viernes por las vías de toda España) y al 35% del resto, en total 1.079 trenes de media distancia afectados de los 3.160 programados para la jornada. Desde UGT preveían que habría una «alta participación» de la plantilla porque estaban convocados todos los sindicatos de las comités generales de Renfe y Adif.

Para intentar paliar el impacto a los viajeros, desde Renfe permitían cambiar los billetes de tren a otro con el horario más aproximado, además de anularlo o moverlo a otra fecha sin ningún coste. Además de este viernes, también iba a haber paros de 24 horas el jueves 30 de noviembre y el 1, 4 y 5 de diciembre. Renfe había notificado por mail o SMS a los viajeros afectados y las posibilidades que tenían de cambio o anulación.

Aunque los trenes de Ouigo e Iryo no estaban afectados, como la huelga afectaba también a los trabajadores de Adif se preveían retrasos o alguna cancelación inesperada.

Las causas del descontento

Los trabajadores de Renfe y Adif acordaron convocar una huelga ante la incertidumbre generada en las plantillas por el traspaso de los Rodalies a Cataluña -pactado entre PSOE y ERC en las negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez- para cinco jornadas de estos meses de noviembre y diciembre. Al descontento se suma la entrada de una empresa privada (MSC) en el capital de Renfe Mercancías, lo que genera mucha incertidumbre laboral para la plantilla, aseguran. El traspaso de Rodalies a gestión de la Generalitat supondrá que Cataluña adquiera el control sobre la gestión de las líneas R1, R2 y R3, incluyendo los trenes y las vías. Posteriormente, se valorarán otras líneas, según el acuerdo entre PSOE y ERC.

Esta huelga podía suponer un gran inconveniente para los miles de pasajeros de tren previstos para este viernes, más en un momento en el que el tren es utilizado como medio de transporte para millones de españoles. Los últimos datos de Adif referentes al mes de octubre señalan que el tráfico ferroviario en España ha crecido casi un 11%, sobre todo gracias a la entrada de nuevos operadores (Ouigo e Iryo) que han reducido los precios de los billetes en las líneas que han entrado.

De hecho, el incremento más significativo en lo que va de año se ha producido en el tráfico de larga distancia, que crece un 33%, en concreto en la alta velocidad, que se impulsó casi un 40%.