«He dejado de ser actriz por culpa de Pat Andrew; ahora soy vidente»

«He dejado de ser actriz por culpa de Pat Andrew; ahora soy vidente»

La primera vez que le escribió pensó que quería acostarse con ella, pero pronto descubrió que sus intenciones eran otras. Quería conquistarla, pero con el argumento de que era un productor ejecutivo de Hollywood que buscaba rodearse de las mejores para emprender un ambicioso proyecto. Y ella iba a ser la imagen. «Me encontró por Facebook», arranca Stephanie, una actriz de 32 años natural de Florida (Estados Unidos) que trataba de impulsar su carrera como intérprete y que creyó encontrar el trampolín que buscaba.

El presunto cineasta Pat Andrew enviaba a Stephanie mensajes sobre él, «como que trabajaba con Aaron Spelling», pero nunca publicaba fotos suyas, recuerda la joven, a la que también le llamó la atención el horario en el que contactaba con ella: «Me escribía a horas raras y pensé que era porque vivía en América». El supuesto estafador estaba sembrando el engaño. La trampa en la que cayeron actores, empresarios, inversores, abogados y establecimientos hoteleros que creyeron en él. Estas son sus historias y las secuelas que les dejó haberse cruzado con el supuesto productor.

La decepción de Stephanie y el cambio radical de vida

Pat Andrew le pidió a Stephanie su correo electrónico para el contrato. Quería incorporarla a su equipo para actuar, leer y organizar castings de sus series. Ella aceptó: «La cosa es que a mí me pagaba y también me costeó los hoteles. No tuve que sufrir por eso. Pero sí que he sufrido en otras cosas. Yo ya no soy actriz en parte gracias a este señor». Dice, por cierto, que el dinero para el hospedaje salió de «un señor suizo» que pagó todo. Ese «pobre señor» al que alude Stephanie es el escritor George Van Mellaert, que ha denunciado al supuesto productor por estafarle casi 500.000 euros con el pretexto de llevar al cine su novela ‘Corruption of Justice’.

Stephanie, junto a George Christie, en la presentación del reparto de la serie 'Marked The Unforgiven'.

Stephanie, junto a George Christie, en la presentación del reparto de la serie ‘Marked The Unforgiven’.


Chema Artero

La vida de Stephanie dio un cambio radical tras su experiencia fallida como protagonista de las series anunciadas por Pat Andrew. «No quiero tener nada que ver con la farándula. Él no me ha sacado dinero -aunque dice que le pidió alguna cantidad para darle la tarjeta del sindicato de actores-, pero me ha quitado la oportunidad de estar en otros proyectos. Mientras estaba con él, me hicieron una propuesta para un papel por el que iba a cobrar 30.000 euros. Era un director famoso y necesitaba a una actriz americana. Me quería a mí, era una oportunidad de las que pasan una vez en la vida. Y la perdí porque Pat Andrew no me dejó aceptarlo ya que tenía un contrato con él».

Tras los reiterados aplazamientos de los rodajes, Stephanie empezó a sentir que el supuesto productor se reía de ellos. «Casi todas las semanas enviaba un e-mail diciéndonos que empezábamos a rodar el próximo jueves y, cuando llegaba el día, nos decía ‘ay, no se puede’ y ponía cualquier excusa. Mandaba fotos de Paramount Pictures, como si estuvieran haciendo anuncios, pero dentro de mí sabía que algo no cuadraba. Este hombre lo ha hecho tan bien para engañarnos… Ahora piensas: ¿Cómo lo hizo para montar todo eso? Había profesionales y agencias que querían hacerse amigos míos para meterse en las producciones de Pat Andrew. Creo que tenía un ángel, te lo juro».

Las mentiras del presunto productor

«Pat Andrew lo ha hecho tan bien para engañarnos… Ahora piensas: ¿Cómo lo hizo para montar todo eso?»

Stephanie

Exactriz

La ya exactriz asegura que todo esto le ha dejado «un trauma» y le ha afectado económicamente, porque su tren de vida aumentó al embarcarse en la aventura de Pat Andrew y empezó a gastar sus propios ahorros. «Nos iba dando largas, pasaban los meses y yo gastando dinero como una loca para estar preparada, ya sabes, vestidos y otras tonterías, porque pensaba que iba a tener dinero cuando saliera la serie. Cada día se veía más claro que no, pero yo quería creer. Pensaba que iba a ser millonaria en poco tiempo», confiesa Stephanie, en unas declaraciones realizadas cuando SUR destapó el caso.

Todo cambió cuando una persona que la conocía, le abrió los ojos: «Me da pena contarte esto, porque sé que estás esperando…». Y le envió un enlace de un artículo de prensa donde se tachaba a Pat Andrew de estafador. «Lo pasé muy mal. Yo era la portada de la serie y usaba mis fotos por todas partes, fotos con George Christie. Pat dijo que todo era mentira. A partir de ahí, cuando tenía que viajar a Málaga, iba temblando. Tengo amigas que trabajaban con ellos y que han huido de Málaga».

Stephanie intentó alejarse, levantar de nuevo su carrera como actriz, pero la losa de haber trabajado con el supuesto productor de Hollywood, y presunto estafador, era demasiado pesada. «Cuando salí de esto, nadie quería contratarme porque no confiaban en mí», afirma la joven, que ha dado un giro radical a su vida: «Ahora me dedico a cosas esotéricas. Soy médium y vidente. Estaba fatal, pero lo bueno es que vi mi camino y soy más feliz».

George Christie, dos años a la sombra de Pat Andrew

En una de las fotos del equipo de ‘Marked the Unforgiven’, Stephanie posa sonriente, en el centro, junto al motero norteamericano George Christie, figura clave en las producciones de Pat Andrew y que estuvo desde el principio, octubre de 2019, en sus proyectos. El ex ángel del infierno ha hablado con SUR y asegura que se siente engañado por el presunto ejecutivo de Hollywood ya que también aplazó una y otra vez el rodaje de la serie basada en su libro de memorias. No obstante, deja claro que Pat nunca le pidió dinero y que los más de dos años que estuvo viviendo en hoteles y apartamentos de Málaga lo costeó su ‘jefe’.

Nikol, Sutish Sharma, Stephanie y George Christie, en una reunión del equipo de la serie 'Marked the Unforgiven'.

Nikol, Sutish Sharma, Stephanie y George Christie, en una reunión del equipo de la serie ‘Marked the Unforgiven’.


SUR

La relación entre ambos se rompió cuando el ex ángel del infierno se enteró por «accidente» de la doble identidad de Andrew. «Su asistente personal me envió un correo electrónico que nunca había visto antes» a nombre de Pat Austin, por lo que el motero y escritor buscó en Internet y llegó a la sentencia del tribunal de Nueva York que lo condenaba a 6,5 millones de dólares, una sanción que nunca cumplió porque desapareció de Estados Unidos y apareció en Europa como Pat Andrew. «Me enfrenté a Pat en persona y todo lo que dijo fue que era una situación financiera muy complicada», explica el colaborador, que permaneció tres meses más en Málaga por su cuenta hasta marzo de 2022. Posteriormente, al conocer la presunta muerte de Pat Andrew en abril de 2023 tampoco se lo creyó: «Me enviaron la captura de pantalla de la esquela e hice que un detective privado lo investigara, pero sin resultados».

Muerte de Pat Andrew

«Me enviaron la captura de pantalla de la esquela e hice que un detective privado lo investigara, pero sin resultados»

George Christie

Ex ángel del infierno y colaborador del presunto productor

George Christie también tuvo un papel protagonista en la falsa compra del Málaga C. F. No solo con su presencia, sino con la de su propia hija, la abogada Moriya Christie, que viajó a Málaga desde California como representante del grupo inversor American CF Investors, cuya cabeza visible era Pat Andrew y que supuestamente pretendía comprar el equipo blanquiazul. La letrada hizo declaraciones y se fotografió frente al campo de la Rosaleda. Sobre este tema, el motero es escueto y admite que todo fue un montaje con el que el presunto cineasta intentó legitimar su imagen de millonario. «Creo que fue un truco publicitario para que Pat pareciera que era un empresario serio», asegura Christie que no da detalles de su participación y la de su hija en esta mascarada, aunque se despide haciendo examen de conciencia: «Quiero pedir disculpas a cualquier persona en España o en cualquier lugar en el caso de que Pat se aprovechara de ella».

Manuel Villamuela, el motero que se cobró la deuda

Entre los que sienten recelo por Christie está George Van Mellaert. El escritor suizo conoció a Pat Andrew a través del motero, que también estuvo presente en la reunión con el presunto estafador y, según la denuncia del novelista, apoyó las palabras de Andrew cuando le hizo creer que lo habitual en las adaptaciones a la pantalla era que el propio autor del libro pagara el coste de la escritura del guion. Aquello se tradujo en un primer pago de 25.000 euros, al que accedió Van Mellaert que acabó pagando a su presunto estafador casi 500.000 euros por adaptar su ‘thriller’ literario ‘Corruption of Justice’, de la que ni siquiera se llegó a escribir una sinopsis.

Manuel Villamuela entró en una de las series de Pat Andrew por motero y dominar el inglés.

Manuel Villamuela entró en una de las series de Pat Andrew por motero y dominar el inglés.


Salvador Salas

Otro que llegó a la series de Pat Andrew a través de George Christie, fue el motero Manuel Villamuela que reconoció al ex ángel del infierno cuando pasó por delante de su negocio en el Mercado Central de Málaga. Se presentó ante su ídolo, el cual le invitó a conocer a Andrew ya que estaba buscando intérpretes que hablaran inglés. «Yo no soy actor y nunca tuve intención de rodar una película o una serie porque tengo mi negocio, pero si te dicen participar con una leyenda viva como Christie, ¿quién dice que no?», cuenta el empresario, al que el presunto productor pidió que le pagara 800 euros para afiliarlo al Sindicato de Actores de EE UU, un requisito inexistente en España. A cambio, el presunto promotor le ofreció un caché de 15.000 euros por capítulo de la serie. «Le contesté que me descontara la inscripción al sindicato de mi primer sueldo, pero respondió que no porque ya lo habían dejado tirado más de una vez», cuenta Manuel que, ese mismo día, puso en su estado de ‘whatsapp’ un foto de «un tío haciendo puenting: era un riesgo pagar, pero merecía la pena tirarse».

Tras pagar 800 euros para entrar en una serie

«Pat Andrew comía muy bien y me compró mucha carne, así que más o menos recuperé lo que me cobró»

Manuel Villamuela

Empresario y motero

Tras pagar, Pat Andrew se pasaba mucho a verlo por su carnicería del mercado, ya que por entonces el norteamericano vivía en un ático de Atarazanas que presuntamente no pagaba y que tuvo que abandonar cuando le cortaron los suministros. «Comía muy bien y me compró mucha carne, así que más o menos recuperé lo que me cobró», cuenta con media sonrisa y cara de haberse tomado la revancha. El resto de la historia es como la de los otros estafados por el presunto productor. Las fechas de rodaje de la serie comenzaron a retrasarse para nunca llegar. Antes de eso, Pat Andrew le había dado su teléfono personal a Manuel y ambos solían mensajearse. Por eso asegura que el Whatsapp del presunto productor siguió teniendo actividad después de su muerte. «En su perfil tenía dos niños corriendo por la playa y justo después de que apareciera la noticia de sus estafas en SUR en julio pasado, la cuenta desapareció», revela el motero que también duda de la muerte del supuesto ejecutivo audiovisual.

Chema Artero, el fotógrafo que también hizo de «bulto»

Chema Artero es fotógrafo profesional y trabaja como ‘freelance’ desde Almería. En 2020, la agencia de publicidad Hormiguea contactó con él y le contó que tenían a un productor de Hollywood que iba a hacer unos rodajes en Málaga y necesitaba una campaña de fotos. «Estaban como en una nube. Él ya les había comido la cabeza y estaban convencidos de que había mucho dinero ahí. Querían una sesión de fotos a la semana en diferentes puntos, así que alquilamos un estudio e hicimos fotos al motero (George Christie) en Málaga y en Tabernas (Almería)», cuenta el profesional, al que han dejado a deber 2.000 euros de sus trabajos.

Una de las sesiones que tuvo que cubrir el fotógrafo Chema Artero con Pat Andrew y George Christie en un casting en el Teatro del Soho.

Una de las sesiones que tuvo que cubrir el fotógrafo Chema Artero con Pat Andrew y George Christie en un casting en el Teatro del Soho.


Ch. A.

«Al principio te deslumbra, pero después ya ves que hay algo raro. Tenía un equipo de producción, todas chicas, que están fatal. Psicológicamente se han quedado muy tocadas porque las engañó; les mandaba vídeos diciéndoles ‘tú eres especial’ y cadenas de mensajes para motivarlas», explica Artero, que fue testigo -incluso participó en el reparto de papeles para hacer «bulto»- del supuesto intento de compra del Málaga y sus planes para adquirir el Teatro del Soho de Antonio Banderas. «Nos hablaba de su amigo Antonio y nos dijo, cuando alquiló el teatro para una audición, que a lo mejor se pasaba a vernos. Pero no vino», cuenta.

Artero recuerda una anécdota que vivieron durante una comida del equipo en el Muelle 1 de Málaga. «Estábamos todos alrededor de la mesa y vimos que Banderas se sentaba en el local de al lado. Le pedimos que fuera a saludarlo y Pat Andrew se excusó diciendo que no lo quería molestar porque era su amigo y lo quería dejar tranquilo almorzando». Ahí, dice, todo empezó a olerle a chamusquina.

Nikol y enséñame el dinero

Volviendo a la foto de George Christie y Stephanie, en la imagen aparecen otras dos actrices que iban a participar en la serie ‘Marked The Unforgiven’. Una de ellas es Nikol, una actriz, cantante y presentadora estadounidense de 50 años que nació en California pero que es de origen hawaiano. Residente en España desde hace dos décadas, se enteró a través de su representante del casting para la serie. «Fui a una audición a Málaga y me cogieron», rememora la intérprete, que añade que también seleccionaron a otros dos compañeros de su agencia. «Nos enviaron un contrato, pero mi agente no firmó nada porque no le vio pinta de ser real. Ponían que íbamos a ganar muchísimo dinero e incluían unas condiciones sin demasiado sentido. Ella les dijo: ‘Hasta que no nos enseñéis lo que estáis haciendo y se empiece a grabar, no firmamos nada’», relata.

Extrañas condiciones laborales

«Nos enviaron un contrato, pero mi agente no firmó nada porque no le vio pinta de ser real. Ponían que íbamos a ganar muchísimo dinero»

Nikol

Actriz

Nikol, que lleva toda la vida dedicada al mundo del espectáculo, sólo perdió tiempo e ilusiones, pero no llegó a poner dinero y se apartó a tiempo: «Ya llevo lo suficiente como para saber que no hay que creer nada hasta que empieza el rodaje». La actriz afirma que, transcurrido un tiempo, empezó a pensar que Pat Andrew estaba «un poco loco». Cuando SUR destapó en julio que se le investigaba por estafa, confiesa que no le sorprendió en absoluto: «Ya había hecho algo parecido antes en Irlanda. Alguien tiene que hacer un documental sobre este tipo».

Enlace de origen : «He dejado de ser actriz por culpa de Pat Andrew; ahora soy vidente»