Una mujer pisó la Luna por primera vez hace unos días, casi un siglo después de que lo hiciera Armstrong. La carrera por alcanzar nuestro satélite con espanautas femeninas se enconó a principios de siglo, con intentos infructuosos por parte de los países habituales en el espacio, y de otros incorporados poco a poco con la globalización de las tecnologías. En este caso, las tres heroínas son ciudadanas de Sinistria, uno de los estados surgidos a raíz de los fuerte conflictos por la escasez de agua que provocaron ingentes movimientos migratorios y enfrentamientos entre poblaciones y gobiernos.
Fronteriza con Diestrania, ambas potencias llevan años peleando entre ellas por ser las primeras en poner nombre femenino a esta parte de nuestra Historia. De hecho, lanzaron a la vez sus cohetes, propulsados por el nuevo combustible a base de plástico y completamente inocuo que promete aliviar la crisis climática que asfixia a medio planeta. Aun así, la humanidad ha seguido empeñada en buscar la Luna abandonando la Tierra.
Hoy hemos conocido la conversación que las tripulantes de ambas misiones mantuvieron en los instantes inmediatamente posteriores a la hazaña lograda por las sinistrianas. Ésta es la grabación desvelada hoy por la agencia espacial VESA, que, pese a ser ajena a este hito, logró captar la charla entre las dos naves:
Cogan (Sinistria): «Base, acabamos de tomar luna. Hemos levantado mucho polvo, pero está todo en orden. ¡Hemos llegado primeras! Y ahora me dispongo a bajar del módulo. Tendré que decir algo para las generaciones venideras…».
Ilustración
Manuel Romero
Tieran (Diestrania): «Habéis hecho trampa. La normativa internacional prohíbe añadir componentes orgánicos al combustible, solo por eso habéis llegado antes. Si hubierais respetado las normas seríamos nosotras las que estaríamos ahí».
Cogan: «No tenéis pruebas, dejadnos disfrutar y aceptad el segundo puesto con elegancia. Es mi turno, quiero pronunciar unas frases para la posteridad. Ejem… Veo desde aquí nuestro maltrecho globo, antes más azul y más brillante…».
Tieran: (le interrumpe) «Prueba a decir éstas: ¡Tramposas! ¡Estáis chetadas!»
Cogan: «Y entre nosotros y la Tierra, apenas alcanzamos a vislumbrar un pequeño punto, la nave de Diestrania que se acerca. Tarde, chicas, demasiado tarde…».
(Bilbao, 1970) Trabaja desde 1998 en El Correo, el periódico más leído de su ciudad natal y en general de Euskadi. Y casi siempre como reportera, palabra que le gusta de forma especial. Antes se dedicó unos años a impartir clases de música, algo que para ella es importante reivindicar. Después de pasar por otras secciones, empezó a hacer reportajes: recaló en la primera etapa de Vivir, luego en V, otra vez en un renovado Vivir y ahora en lo que se llama Nuevas Narrativas, en busca de otras formas de contar las cosas.
Créditos
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Narración
Raquel Peláez -
Producción técnica
Íñigo Martín Ciordia -
Diseño sonoro y mezcla
Rodrigo Ortiz de Zárate -
Ilustración
Manuel Romero -
Coordinación
José Ángel Esteban
Soy William Abrego, me uní como ejecutivo de SEO y me abrí camino hasta el puesto de Gerente Asociado de Marketing Digital en 5 años en Prudour Pvt. Ltd. Tengo un conocimiento profundo de SEO en la página y fuera de la página, así como herramientas de marketing de contenido y diferentes estrategias de SEO para promover informes de investigación de mercado y monitorear el tráfico del sitio web, los resultados de búsqueda y el desarrollo de estrategias. Creo que soy el candidato adecuado para este perfil ya que tengo las habilidades y experiencia requeridas.
Enlace de origen : Relato Sonoro | Conflicto en la luna
