Miles de personas reciben el Año Nuevo en la «fiesta de la libertad» de la ‘rave’ de Fuente Álamo

Esta fiesta ilegal es una especie de remix de la ‘rave’ que el año pasado se montó en Granada y que este 2024 ha elegido una zona rodeada de montañas para bailar, fumar y beber sin molestar a nadie y sin obedecer normas de nadie porque «esta es la fiesta de la libertad», dice un joven llegado desde Santa Pola, con acento refinado que para nada desentona en un lugar donde caben todos. Porque lo que más se ve por aquí es diversidad sexual, de idiomas, de culturas y también muchas papeleras improvisadas y muchos carteles indicando que hay que respetar la limpieza de la zona.

La propia Guardia Civil admite que el ambiente es «tranquilo». Dan fe de ello María y Juan Pedro, una pareja de vecinos de Fuente Álamo, ya abuelos, que se acercaron al circuito porque les gusta la fiesta y querían ver la que hay montada en las afueras de su municipio.

Aunque la edad media de los asistentes ronda de los 20 a los 30 años, Cama, de Barcelona, tiene 43 y está encantado con el paisaje seco de Fuente Álamo. Para él es un privilegio vivir en un sitio como éste y aquí pretende quedarse hasta el final, que muchos sitúan después de Reyes. Tiene su camión aparcado en buen sitio y dentro dispone de todas sus pertenencias. No se puede pagar un alquiler en Cataluña y por eso vive en el vehículo que se trajo a la fiesta.

Llegado desde Cádiz, un motero asegura que vino a Fuente Álamo en furgoneta con la moto dentro y trajo consigo hasta el butano para cocinar. Él va de ‘rave’ en ‘rave’ y asegura que en el circuito hay muchas caras conocidas de grandes fiestas multitudinarias por toda Europa. Él se enteró de la fiesta en el circuito de Fuente Álamo mientras trabajaba por Francia y aquí está dispuesto a recibir el 2024 sin que nadie le diga cómo tiene que vestir para entrar a un local. «Aquí no hay normas» porque, asegura, «todos saben lo que tienen que hacer».

Por los alrededores no hay dispositivo policial y sí una hilera de coches, furgonetas, caravanas y coches y música, mucha música. En cada esquina hay un escenario improvisado y un Dj dándolo todo desde el viernes por la noche, cuando llegaron los más madrugadores. La Guardia Civil los detectó este domingo al mediodía.

En el Ayuntamiento y en la Delegación del Gobierno la irrupción de esta «’rave’ ilegal» ha causado «una enorme preocupación, por no saber cómo se puede actuar para detenerla». Se espera que a partir del martes las Fuerzas de Seguridad comiencen a identificar y a denunciar a los asistentes dentro del recinto.