La prometedora carrera de Henrique Rocha despega en el Challenger de Murcia

La diferencia de partida no era solo de 13 años, sino entre la veteranía de Basilashvili frente a la primera final de un Challenger para Rocha, pero el portugués aceptó el pulso desde el inicio. Mucho peloteo, intercambio de golpes desde fondo de pista, puro juego de tierra batida. Sin embargo, las bolas de ‘break’ desaprovechadas y la potencia del georgiano empezaron a desarbolar al joven luso a mediados del primer set. Basilashvili, que imprimió un ritmo de bola propio del circuito ATP, también fue más certero y agarró su primera opción de rotura para asegurar el primer set.

Le entraron las dudas a Rocha, que atravesó un bache y cedió también su primer servicio de la segunda manga. El enredo pudo ser definitivo, pero salvó el segundo ‘break’, se sacudió los nervios y volvió a soltarse con su poderosa derecha. El partido se equilibró y también se ensució. El georgiano se enfadó por una discusión sobre una bola dudosa y llegó a recibir una advertencia por golpear una pelota de malas maneras. Parecía moverse mejor en el barro e incluso sacó para llevarse el torneo, pero Rocha no es solo talento. Está semana ha demostrado que también le sobra carácter y mandó el set a un tie break en el que arrasó (7-0).

Tal vez se guardó algo Basilashvili porque recuperó su versión más sólida para empezar 3-0 el set definitivo. Y ni así se rindió Rocha, un notable proyecto de tenista, que encadenó 5 juegos cuando estaba al filo del abismo. En un final emocionante, a la altura de toda el partido con varios ‘breaks’ y cambios de guion, se impuso la efervescente juventud de Rocha. Si el año pasado Murcia descubrió a Arnaldi, ya un habitual en torneos de élite, este año alumbró a Rocha. El joven portugués, que ha tenido la mejor semana de su vida, con este triunfo se mete entre los 200 mejores del mundo y llama a la puerta del circuito ATP.