Adiós al subsidio para mayores de 45 años y la ayuda familiar: estos son lo cambios que prepara el SEPE

El 1 de noviembre entrará en vigor la reforma del subsidio por desempleo, después de que el Consejo de Ministros aprobará el pasado 21 de mayo el Real Decreto-ley 2/2024, a propuesta del Ministerio de Trabajo y Economía Social. Para informar a todos aquellos que se benefician de estas ayudas, el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) publicó en su página web todas esas modificaciones.

Con esta iniciativa, el Ejecutivo pretende incentivar la reinserción de los desempleados en el mercado laboral, una medida para favorecer el propósito de pleno empleo fijado por el Gobierno para esta legislatura. Entre las principales novedades podemos encontrar la agilización del proceso administrativo para que todo sea más eficaz, además de que sus beneficiarios se incorporarán a los programas prioritarios de la Cartera Común de Servicios del Sistema Nacional de Empleo. También se eliminará el mes de espera para evitar vacíos de cobertura.

Además, también cambian las cuantías, que serán las siguientes: los 6 primeros meses: 95% IPREM: (570 euros según la referencia actual); 6 meses siguientes: 90% IPREM: (540 euros); resto del periodo: 80% IPREM: (480 euros).

Qué ocurre con el subsidio para mayores de 45 años y la ayuda familiar

Al igual que la reforma que el Gobierno diseñó a finales del año pasado y que no se llevó a cabo, ya que fue tumbada en el Congreso de los Diputados con los votos en contra de PP, Vox, UPN y Podemos, con esta se pretende ampliar la cobertura del subsidio asistencial a los menores de 45 años sin cargas familiares. Y es que hasta este momento solo los desempleados mayores de esta edad sin cargas familiares que tras agotar la prestación contributiva siguen sin encontrar empleo podían beneficiarse de ella.

Es por ello que a partir del 1 de noviembre tanto el subsidio para mayores de 45 años y la ayuda familiar ‘desaparecerán’, pero para dar paso a una nueva ayuda que englobe a todos los colectivos. Su duración estará marcada por diferentes factores: las responsabilidades familiares, la edad en la fecha de agotamiento de la prestación y la duración de la prestación por desempleo agotada.

Para los menores de 45 años, sin cargas familiares, para los que la duración de la prestación por desempleo agotada sea igual o mayor de 360 días, la duración máxima será de 6 meses, al igual que para los mayores de 45 años que hayan recibido la ayuda 120 días o más. Por otro lado, para los que acrediten cargas familiares, independientemente de la edad, será de 24 meses si la duración de la prestación por desempleo agotada fue de 120 días o más y de 30 meses si fue de 180 días o más.

Quienes hubieran accedido al subsidio sin acreditar responsabilidades familiares, podrán hacerlo posteriormente, siempre que dicha acreditación y la solicitud de ampliación del subsidio tenga lugar dentro del plazo de los doce meses siguientes a la fecha del hecho causante del subsidio. En este caso, se ampliará la duración máxima del subsidio inicialmente reconocido hasta la que corresponda en función de la duración de la prestación contributiva agotada.

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