Vecinos de San Pedro en Lorca, preparados para encerrarse en el Ayuntamiento por la falta de soluciones a los daños en sus casas

Los vecinos del barrio de San Pedro en Lorca se encerrarán el lunes en la sala de Cabildos del Ayuntamiento, después de la celebración del Pleno, para reclamar soluciones a los daños en sus casas afectadas por las obras del vial de los barrios altos.

Lo anunció este viernes el portavoz de la coalición IU-Podemos-AV, Pedro Sosa, que está dispuesto a encerrarse con ellos. Los vecinos están en desacuerdo con las «ofertas insultantes a modo de indemnizaciones finiquito» tras las valoraciones realizadas por el perito externo contratado por el Ayuntamiento, que «no cubren ni una mínima parte de las cantidades» necesarias para la reparación de las casas, dijo Sosa.

Mostró algunas cartas remitidas por la aseguradora de la empresa constructora del vial a los afectados y en uno de los casos se ofrece una indemnización de 398 euros cuando el presupuesto de obra para reparar los daños en la vivienda es de 18.200 euros. Según el edil, ninguno de los vecinos ha querido cobrar las indemnizaciones propuestas.

La casa más afectada, situada en el número 22 de la calle Tejeros fue desalojada el 8 de julio de 2023 por los graves daños estructurales que sufrió tras las obras del vial y continúa precintada desde entonces. El informe pericial determinó en febrero que en el inmueble hay daños achacables a las vibraciones del terreno por la construcción de la carretera por valor de 8.000 euros y que otros ya existían con anterioridad a los trabajos.

La familia de Francisco Martínez, compuesta por cuatro adultos y dos niños malvive desde hace casi un año en el garaje anexo a la casa y pese a que el Ayuntamiento le ofreció una vivienda de alquiler para su realojo renunciaron a ella porque, según este vecino, no puede hacer frente a los gastos de luz y agua además de los que ya están pagando por su vivienda habitual.

«Estamos en el mismo punto que hace un año», dijo en declaraciones a LA VERDAD. Aseguró que la reparación de la casa costará al menos 60.000 euros porque hay que reparar pilares y tabiques y que ha puesto la situación en manos de un abogado. «Mi casa estaba arreglada desde el terremoto» de 2011 y «quiero que se quede como estaba».

Sosa reclamará en el Pleno que el Ayuntamiento, «como titular público de la ejecución de las obras» atienda «de manera inmediata a los propietarios afectados» y asuma el coste de las reparaciones presupuestadas. En el caso de no ser posible, añadió, se deberá garantizar a los damnificados una vivienda de similares características.

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