Tres de cada cuatro murcianos están bastante preocupados por la inmigración irregular

La colocación de la inmigración irregular en el centro de la agenda política se está trasladando a la población, como refleja el Barómetro de Otoño del Cemop. Es evidente, ya que la preocupación ha subido mucho hasta colocarse como el tercer problema de los murcianos, pese a estar en una zona intermedia en los estudios anteriores. Este aumento coincide con su creciente presencia en el debate entre los partidos, cargado de crispación.

De hecho, el centro de estudios ha aprovechado esta edición para preguntar en concreto sobre esta cuestión, lo que ha revelado que tres de cada cuatro murcianos (el 75%) están bastante o muy preocupados por la inmigración irregular. Esta inquietud es mayor entre las mujeres (76,9% frente al 73,2% de los hombres) y entre las mayores franjas de edad. Los jóvenes de 18 a 30 años son los menos alarmados, sobre todo los estudiantes.

Si se analizan los datos por grupos sociales, las diferencias afloran en mayor medida. Los más preocupados son los desempleados y quienes realizan un trabajo doméstico no remunerado, así como los votantes de derechas. En cambio, la inquietud baja entre los empleados por cuenta ajena y los votantes de izquierda.

En resumen, los resultados del barómetro revelan «una clara polarización en la sociedad», según el Cemop. La mayoría de la población «expresa una ‘preocupación negativa’, motivada por su impacto en la seguridad y los recursos públicos», pero hay «una minoría significativa que expresa una ‘preocupación positiva’, motivada por el bienestar de las personas inmigrantes».

Diferencias ideológicas

Estas visiones opuestas se manifiestan según la ideología de cada encuestado. La principal causa de la preocupación por la inmigración irregular está relacionada con la percepción de que «produce un incremento de la delincuencia», pero esta teoría se defiende mucho más entre los votantes de del PP y, sobre todo, de Vox. Estos encuestados también señalan que los extranjeros irregulares «se quedan con los beneficios y ayudas sociales que corresponderían a los españoles». Y, en menor medida, creen que «quitan trabajo a los españoles».

En cambio, también hay un porcentaje de población significativo a quien le preocupa la dimensión humana de la tragedia. Para los murcianos de izquierdas, este es el factor principal a abordar, sobre todo a los votantes de Podemos. En menor medida para los que apoyaron al PSOE en las últimas elecciones. De hecho, dos de cada cinco socialistas apoyan el relato de que la inmigración irregular aumenta la delincuencia.

Los murcianos no perciben más inseguridad

Alguna de esas teorías está ligada a la inseguridad, otro de los temas centrales del debate político que ha abordado el Cemop. En este sentido, cabe subrayar que más de la mitad de los encuestados responden que no han sentido en los últimos meses un sentimiento de menor seguridad personal en actos cotidianos como andar por la calle o salir de noche.

Es decir, una percepción que choca con la visión de que el aumento de la inmigración irregular provoca un incremento de la delincuencia. El Cemop también apunta que «las personas que tienen esa sensación de menor seguridad son las situadas en el espectro ideológico de la derecha».

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