María Ramírez
Sábado, 2 de noviembre 2024, 10:54
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El perro se ha consolidado como un miembro más de la familia en numerosos hogares de España. Se estima que en nuestro país hay ya más de nueve millones, lo que supone un incremento de más del 48% en cuatro años. Lo cierto es que estos animales de compañía aportan alegría y bienestar en el día a día, pero como con cualquier otro tipo de convivencia, también surgen responsabilidades.
A pesar de que los caninos son universalmente conocidos como ‘el mejor amigo del hombre’, no todos comparten esta percepción. Uno de los aspectos que más conflicto suele generar entre propietarios y vecinos, especialmente en edificios o en residenciales, es el tema de los ladridos.
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Estos sonidos pueden molestar e incluso interrumpir el descanso de quienes viven en las proximidades. Por este motivo, los dueños de estas mascotas deben atender y seguir las normativas que regulan esta situación para evitar problemas..
Qué dice la ley
No hay una legislación que se enfoque específicamente en los ladridos, pero sí están contemplados dentro de las normativas locales que regulan la convivencia. En ellas, estos sonidos son considerados como ruidos molestos, del mismo modo que ocurre con la música alta o las obras. No obstante, las disposiciones varían dependiendo de la localidad.
Por lo general, se establecen franjas horarias durante las cuales se prohíbe generar ruidos, normalmente desde las 22.00 hasta las 08.00 horas. Durante estos intervalos de tiempo, cualquier sonido que interrumpa la paz del vecindario puede ser objeto de quejas y, en el peor de los casos, de multas. Fuera de estos horarios, si ladra de manera ocasional, normalmente, no es motivo de sanción. Sin embargo, si se prueba que se producen de manera continuada, los propietarios podrían recibir una multa.
Cuantía de la sanción
El importe de las sanciones no es fijo, aunque se suele situar alrededor de los 300 euros. Para que el dueño de un perro pueda recibir esta penalización, en primer lugar debe haber recibido una denuncia por parte de uno o más vecinos. Estos deberán presentar pruebas que respalden que los ladridos han perturbado su calidad de vida de forma reiterada como grabaciones de audio, testimonios o incluso informes que midan los decibelios.
Seguidamente, las autoridades locales deben realizar una evaluación de la situación para considerar tanto la intensidad del ruido como la duración del mismo. Finalmente, si se determina que, efectivamente, los ladridos son molestos y que ocasionan alteraciones en el bienestar de los denunciantes, se podrá imponer una multa. Para evitar estos escenarios, se recomienda que las familias con estas mascotas implementen medidas preventivas para controlar que su perro no ladre en exceso.
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Enlace de origen : Cuidado si tu perro ladra a estas horas: te podrían multar con hasta 300 euros
